La necesidad de impulsar una nueva
Ley del Suelo como paso previo para impulsar el planeamiento y planificación de Ceuta durante las próximas décadas es evidente. O, por lo menos, así lo es para el Colegio Oficial de Arquitectos de Ceuta (
COACE).
Llevan meses desde que entró la nueva ejecutiva encabezada por José María Mora Camacho, el decano del Colegio, debatiendo en la junta de gobierno del colegio este asunto.
Incluso, con el consejero de Fomento y Turismo, Alejandro Ramírez, con el que se reunieron hace algunas semanas y al que le se seguirán exponiendo esta problemáticas en futuros encuentros.
Las transformaciones socioeconómicas y políticas de Ceuta y su entorno de las dos últimas décadas han supuesto “todo un desafío” para nuestra ciudad y “de manera más específica para el urbanismo”, sobre todo si tenemos en cuenta que el Plan General de Ordenación Urbana (
PGOU) es de 1992, “anterior a la aprobación de nuestro Estatuto de Autonomía, pero es que la Ley del Suelo, a la que se ciñe, es de 1976”.
“Mientras las comunidades autónomas han tenido la oportunidad de desarrollar leyes del suelo y de arquitectura que dieran respuestas a sus especificidades, nosotros nos hemos quedado con una ley estatal que solo se aplica en Ceuta y en
Melilla, y sin ningún intento por parte de nuestras autoridades porque se actualice”, explicaba el decano del COACE.
José María Mora, decano del COACE: "Nos hemos quedado con una ley estatal obsoleta que solo se aplica en Ceuta y Melilla”
De este modo, para José María Mora las preocupaciones de los diferentes gobiernos locales ha sido la redacción del PGOU, que “más allá de un complejo y burocrático documento técnico, lleva implícito el marco en el que se sustentan el desarrollo de una ciudad y el bienestar de sus habitantes”.
Y es que, para el Colegio de Arquitectos ceutí, la planificación es la base de un buen desarrollo urbano, pero “ha de estar dotada de una legislación y de una reglamentación que le permita ejecutarlo y gestionarlo de manera adecuada”. “No se trata solo de tener un documento titulado PGOU. Con una ley del 76 y un plan general del 92, no es posible planificar una ciudad que se desarrolla en 2021, cuanto menos”, insisten.
De hecho, el COACE ahora mismo tiene todos sus esfuerzos puestos en trasladar al Gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta, y al de España la importancia de contar con una ley específica que ayude a resolver los problemas urbanísticos y arquitectónicos de la ciudad “para trascender a resolver los problemas económicos y sociales que emanan de los mismos”.
Para ello, consideran “necesario hacer pedagogía en diferentes asuntos y ante distintos interlocutores” para que el ciudadano también entienda la importancia de contar con una nueva ley del suelo y actualizada.
“Además de explicar qué problemas concretos se podrían solucionar con un texto adaptado a la realidad de Ceuta, será imprescindible contar con el apoyo de autoridades, partidos políticos, instituciones estatales con sede en Ceuta, colegios profesionales, asociaciones... y hacerles ver que se trata de una cuestión de Estado, que requiere consenso y que necesita una planificación y un desarrollo a lo largo de los años, independientemente de los tiempos electorales”, reiteran los profesionales.
“Será imprescindible contar con el apoyo de autoridades, partidos políticos e instituciones”
Esta ley, apuntan desde el COACE, debería “servir de marco para la adecuada coordinación de las distintas acciones, planes y programas que tengan incidencia sobre nuestro territorio, estableciendo sobre el mismo la distribución global de usos y actividades, las infraestructuras básicas, las áreas sujetas a limitaciones específicas, las medidas de protección del medio ambiente y aquellas otras determinaciones que sean necesarias para articular los planes y normas que lo desarrollen”.
Por otra parte, la nueva ley del suelo debe procurar, incluso, que se incluyan “las modificaciones y adaptaciones de las demás leyes sectoriales que inciden en el urbanismo local para reducir al mínimo imprescindible y, en su caso, eliminar de manera racional y consensuada las servidumbres y afectaciones que generan en un marco de falta de coordinación”.
La situación que arrastra Ceuta desde hace bastantes años, con la singularidad de contar con un ámbito territorial tan reducido, “con el lastre de esa normativa atípica y superada, y dependiente de una administración central, como única capaz de legislar en la ciudad”, hace que sea necesaria “una ley urbanística que arbitre soluciones adecuadas a los problemas locales persistentes en lo que respecta a los instrumentos de ordenación del territorio” y que se adapte a las condiciones “especiales y específicas” de nuestra ciudad.
La actual Ley del Suelo de Ceuta es de 1976 ya que “dejó de actualizarse”
La elaboración de una Ley del Suelo “específica para Ceuta” debería ser “la prioridad de las diferentes administraciones”, tanto estatales como locales, ya que la actual (de 1976) “dejó de actualizarse para Ceuta y Melilla al desarrollar todas las comunidades autónomas sus propias leyes del suelo”.
“Esta situación hace que, entre otras cosas, el PGOU no tenga suficiente alcance legal para dar respuestas a los problemas estructurales de nuestra ciudad, como son la escasez de terrenos, condicionadas por los límites marítimo-terrestre, la dotación de una red de transporte adaptada a la densidad edificatoria, la compatibilidad Puerto-Ciudad o las dificultades para generar nuestra propia energía, entre otros muchos hándicaps”, enumeraba José María Mora Camacho, decano del Colegio Oficial de Arquitectos de Ceuta.