El portavoz del
Ejecutivo de Ceuta, Alejandro Ramírez, ha opinado este miércoles que el incremento del número de
entradas irregulares de
inmigrantes menores y adultos registrado en la ciudad en lo que va de año prueba que “parece que el país vecino no está cumpliendo” con la labor de “control de la frontera” por la que Pedro Sánchez alabó a
Marruecos hace apenas siete días en Rabat. En declaraciones a los medios tras la reunión semanal ordinaria del
Consejo de Gobierno, el también consejero de Fomento ha dicho “no tener constancia” de si Sánchez ha respondido ya a la petición formal de una entrevista personal que el presidente de Ceuta,
Juan Vivas, le trasladó la semana pasada. “Ya ha habido oportunidad de tratar el tema en exclusiva con el ministro del Interior y se ha pedido cita al de Asuntos Exteriores porque esta problemática va más allá de la gestión, trasciende al tema político y a las relaciones con el país vecino”, ha reconocido Ramírez. Desde el punto de vista del Gobierno de Ceuta “a la luz del incremento casi diario que estamos teniendo [del número de entradas irregulares] obviamente parece ser que el país vecino no está cumpliendo esa labor de control de la frontera y de ahí que nuestra línea de trabajo va en un doble sentido: la gestión local de la situación que se produce y el traslado al Ejecutivo de la Nación de las relaciones que se deben mantener con el país vecino, que esperamos y deseamos sean las mejores posibles porque el ámbito de la inmigración depende de ambas partes”.
Sánchez aseguró el miércoles de la semana pasada en Rabat tras ver al monarca alauita, Mohamed VI, que “tanto en la lucha contra la migración irregular como en el impulso a la migración regular la cooperación que tenemos con el Reino de Marruecos es extraordinariamente positiva”. “No tenemos en absoluto ningún reproche que hacer, como tampoco tenemos ningún reproche que hacer en el ámbito de la lucha contra el narcotráfico”, añadió el presidente español. Solamente durante las jornadas del domingo y el lunes pasados accedió irregularmente a la ciudad autónoma un centenar de inmigrantes, en su inmensa mayoría jóvenes varones de nacionalidad marroquí,
un 35% menores de edad. El Reino alauita no acepta, además, la devolución de sus nacionales interceptados en frontera. El
Centro de Acogida Temporal de niños migrantes solos que gestiona la administración local ya alberga a casi 240 adolescentes sin compañía, casi el doble del máximo que debería tener incluso en situaciones de emergencia (132). El consejero de Presidencia del Gobierno de Ceuta, Alberto Gaitán, se desplazará el próximo lunes a Madrid para intentar acelerar la activación del plan de contingencia que se ha solicitado al Ministerio de Infancia y Juventud para derivar parte de esos menores a la península “mirando por su interés superior”. Con respecto a los adultos, Ramírez ha indicado que las entradas “continuas” de mayores de edad de las últimas semanas dibujan una situación “compleja” en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes
(CETI) tras varios meses con menos de sus 512 plazas ocupadas.