El Pleno de la Asamblea ha aprobado este martes una
propuesta de Vox transaccionada por el
PP para “promover las actuaciones necesarias” e “iniciar los trámites oportunos” con el objetivo de poner en marcha un horno crematorio para mascotas en Ceuta, así como poner en marcha campañas informativas con el fin de que toda la ciudadanía sepa los trámites que debe seguir en caso de muerte de un animal de compañía. La consejera de Sanidad del Ejecutivo local, Nabila Benzina, se ha remitido a la normativa vigente, que establece una distancia mínima entre cementerios para enterrar perros o gatos y núcleos urbanos de 1.500 metros, para justificar su inexistencia y la imposibilidad de plantearse su creación a la vista de la escasez de suelo en la ciudad. “Vamos a estudiar la posibilidad de implantar un procedimiento de incineración de
perros, gatos y otras mascotas para evitar un problema sanitario y ambiental y para dignificar también la despedida a mascotas fallecidas atendiendo, en paralelo, las firmas recogidas en ese sentido”, ha anunciado la miembro del Gobierno. El portavoz de
Vox, Juan Sergio Redondo, ha lamentado la “frialdad” de los protocolos que se aplican actualmente tras el fallecimiento de cualquier animal de compañía, que suelen terminar en una planta incineradora en la península. “No pueden ser enterrados en la ciudad ni abandonados o arrojados a contenedores y son muchos los propietarios que querrían incinerar o enterrar aquí de forma digna a sus mascotas, como en otros puntos de España”, ha argumentado. Tanto los diputados del PSOE como los del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC) se han pronunciado en contra de la propuesta defendida por la formación de extrema derecha. A principios de julio los promotores de una iniciativa popular en el mismo sentido que la planteada por Vox ya habían logrado reunir mil firmas de apoyo.