La Primera Sala de lo Penal del Tribunal de Apelación de Tánger condenó a dos gendarmes a 5 años de prisión por su participación en casos de fraude, inmigración e inmigración secreta. Según fuentes conocedoras del caso, los involucrados trabajaban en el puerto mediterráneo de Tánger y habían estado involucrados con una persona que estaba activa en el contrabando de inmigrantes ilegales de Tánger a España.
Las mismas fuentes dijeron que el arresto de los gendarmes se produjo después de la detención del principal contrabandista, cuyas investigaciones revelaron que estaba conectado con los Duntrim en el puerto mediterráneo de Tánger, lo que le facilitaba cruzar a los inmigrantes clandestinos.
El caso se produjo después de que varias personas presentaron quejas, lo que llevó a una investigación que ha sacado a la luz todo este asunto.