Aunque se había dicho que el desalojo sería a primera hora, no ha sido sino hasta después de las diez de la mañana que ha salido una furgoneta de Cruz Roja con los primeros usuarios del albergue del Tarajal de Ceuta, cuyo cierre la Ciudad había confirmado para este jueves, pero que debido a "inconvenientes técnicos de última hora" no se había llevado a cabo incluso horas después.
Uno de ellos, Juan, un español de 68 años, sería trasladado hasta la residencia Nuestra Señora de África, mientras que el resto sería llevado hasta Servicios Sociales, para conocer qué alternativas tenían para ellos, aunque no existían garantías al respecto.
“Los demás tienen que esperar a ver qué solución les dan, espero que sea pronto para todos igual”, ha dicho Juan poco antes de montarse en la furgoneta.
“Ellos ahora mismo tienen que esperar una solución, lo mismo que yo esperaba y a mí me ha venido por lo pronto así”. Al salir le ha deseado lo mejor a sus compañeros y ha pedido que haya una respuesta rápida para todos ellos.
Puertas adentro y puertas afuera del lugar el ambiente era de incertidumbre y de lo único que estaban seguros los que todavía permanecían en el albergue es que tenían hasta el mediodía de este jueves para salir de ahí, pues ese había sido el plazo dado por la Ciudad para el cierre. Sin embargo, pasada esa hora, el lugar permanecía abierto y desde la Ciudad informaban que habían surgido algunos impedimentos por los que no había sido posible la clausura de la nave, tal y como se había informado un día antes.
Hay que recordar que la Consejería de Presidencia y Relaciones Institucionales recordó el pasado miércoles que este 21 de abril procedería al cierre definitivo de este recurso asistencial que fue habilitado a consecuencia de la crisis de mayo y que la asistencia integral que hasta ahora prestaba Cruz Roja en el lugar, a través del contrato mantenido con la Ciudad, dejaría de prestarse.
Asimismo, desde la Consejería de Servicios Sociales habían asegurado que continuarían trabajando en la atención e información sobre opciones de ayuda y alojamiento a los ciudadanos de nacionalidad española que hasta este jueves podrían estar alojados en el albergue. Recalcaron que valorarían la situación sociofamiliar de estas personas para así poder ofrecerles una alternativa a la situación de vulnerabilidad que padecen.
Ahora que Marruecos ha encontrado petróleo, que se lleve a sus nacionales y los mantenga su rey, que tanto quiere a España.