La consejera de Economía y Hacienda de Ceuta, Kissy Chandiramani, espera que el “diálogo” abierto con los representantes del
Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) llegue a buen puerto tras el
plante de bomberos anunciado por los sindicatos UGT, CCOO y CSIF, que se niegan a hacer cualquier servicio extraordinario (como el de esta noche por San Juan) si no se recuperan también los retenes estivales contra incendios, cuyo coste se cifra en unos 52.000 euros. El
Gobierno instó al Cuerpo a reorganizar sus servicios con los 12 bomberos por turno de los que dispone (con un desembolso en horas extra de 700.000 euros al año) para cubrir esa labor de detección temprana de conatos de fuego en el
Monte Hacho o García Aldave y después
barajó contar con Protección Civil para la misma misión, pero desde el SEIS han lanzado un órdago al Ejecutivo: o todas las horas extra o ninguna. “Estamos en negociaciones para intentar llegar a un acuerdo y estoy convencida de que lo alcanzaremos”, ha dicho Chandiramani, que ha recordado que el Convenio Colectivo establece que “se puede obligar” a los funcionarios cuando “está en riesgo la salud o la seguridad de las personas, algo que parece evidente en San Juan”. “Espero no tener que llegar a ese extremo y que seamos capaces de alcanzar un acuerdo porque la situación lo requiere, el momento es importante tras dos años sin poder festejar esta fecha... Estoy segura de que eso primará por encima de cualquier otro interés”, ha deseado. El Gobierno mantiene “negociaciones” abiertas con los sindicatos (este mismo jueves por la mañana ha tenido lugar una reunión con delegados del SEIS) para “llegar a un consenso sobre la exigencia del Tribunal de Cuentas de que las horas extraordinarias lo sean realmente, no que se repitan en el tiempo y queden establecidas como estructurales”. En su último informe, el órgano fiscalizador cifró en más de 1,1 millones de euros las cantidades abonadas en la Ciudad por gratificaciones denominadas ‘horas por servicios extraordinarios’. Las cobró un total de 425 funcionarios, es decir al 51% de la plantilla, un escándalo: “La prestación regular de estos servicios fuera de la jornada no ha tenido el carácter extraordinario recogido en el Acuerdo regulador, ni se ha circunscrito a los casos excepcionales previstos en el mismo, habiéndose observado que su retribución se ha realizado de forma periódica en el tiempo y fija en su cuantía”, denunció el Tcu. “Cuando uno se sienta a negociar a veces hay tiranteces, pero hay que ver servicio por servicio teniendo en cuenta también el horario de verano de la administración, con el que se sale a las 14.00 en lugar de a las 15.00 horas en ámbitos como Mercados o Desratización y Desinfección... Vamos a seguir negociando, como con el SEIS, y espero llegar a buen término para que no afecte a servicios públicos básicos”, ha tendido la mano.