Un grupo de instagramers, a las que une la amistad y la afición por la repostería, se han retado en esta red social ante el inminente inicio del Ramadán. “Se nos ocurrió organizar un challenge diferente a todo lo que se ha hecho durante el confinamiento y, además, dedicado al mes sagrado que está a punto de comenzar”, ha explicado Nora Elmrabet, la única que vive en Ceuta del grupo que ha completado este desafío con un delicioso resultado.
Estas siete amigas se propusieron grabar un vídeo en el que se entregan virtualmente un cucharón ‘mágico’ que convierte los ingredientes de la cocina en productos típicos de la gastronomía que los musulmanes preparan de manera aún más especial en esta época del año.
Una de ellas arranca el reto llamando a la puerta del Ramadán de 1441, el año 2020 en el calendario islámico. Cuando ésta se abre a la visitante, suena una bienvenida musical que acompaña al usuario de Instagram hasta finalizar este apetitoso viaje por las cocinas de las participantes, donde las familias preparan los platos que se compartirán desde el atardecer.
Harira, chubaquía, pastela, sfuf...
Ingredientes naturales, pulcramente colocados y llenando de color las encimeras, deleitan los sentidos y transportan, de forma figurada en tiempos de confinamiento, a la emoción de la ruptura del ayuno. Con solo cubrir el objetivo de la cámara, la app hace que aparezcan delante de nuestros ojos platos que nunca faltan en la mesa: harira, chubaquía tanto clásica como de churro, pastela de pollo, sfuf…
Todo con una cuidada puesta en escena que rematan con un deseo, Ramadan Mubarak, trazado sobre una capa de harina, azúcar e incluso canela encima de la mesa de trabajo.
Aunque por las creaciones de Nora Elmrabet, que pueden verse tanto en Instagram como en Facebook, se podría pensar que es una profesional de la repostería, solo se reconoce como una amante de la cocina y la repostería.
Este challenge ha tenido muy buena acogida entre sus seguidores pero, sobre todo, este grupo de amigas se queda con las “risas compartidas porque ha sido fantástico”.
El mes sagrado significa reflexión y oración, pero también es una época en la que la gastronomía cobra gran protagonismo al caer el sol.