Dice Ceuta Ya! que el PP es un indecente porque utiliza como excusa a las familias con hijos con TDAH para arremeter contra la gestión socialista. No les falta razón, aunque se quedan cojos. En política la decencia se perdió hace tiempo, tanto que hoy asistimos a la gobernanza de grupos de intereses disfrazados de siglas que aprovechan su historia para mantenerse en el poder.
No hay ideologías, ni izquierdas, ni derechas. No hay nada. Solo luchas por el poder de quienes levantan el brazo para pedir el voto mientras buscan grupos donde apoyarse. No hay más.
El PP utiliza los problemas de las familias con TDAH, pero lo hace al mismo nivel de indecencia política que lo haría el PSOE. Son iguales, la gestión demostrada es tan ineficaz en áreas de peso que solo tapan sus vergüenzas a golpe de crítica en comunicados que difunden a los medios y que vienen a sustituir a las antiguas ruedas de prensa donde se podía preguntar.
No les interesa. Los comunicados que incluso ya los preparan con Inteligencia Artificial son la mejor forma de hacer llegar la idea que ellos quieren sin cuestionar nada.
La política hace tiempo que dejó de serlo, hoy es un negocio más, un grupo de intereses bien avenidos para sacar adelante solo los proyectos y gestiones que interesan a unos pocos, no a los ciudadanos.
Que el PP o el PSOE sean tildados de indecentes ni es noticia ni les afecta, porque la decencia se perdió cuando dejó de interesar la tierra, los problemas del vecino, los proyectos beneficiosos para todos.
Si revisan la hemeroteca verán que llevamos años escribiendo sobre las mismas carencias y prometiendo las mismas acciones.
Nada cambia, todo marcha a paso de tortuga y se permiten el lujo de hablarnos de economía verde, azul e inteligente mientras la población se rompe, aumentan los recelos, se provoca una desestructuración social sin precedentes. La indecencia es marca de la casa, aunque ahora Ceuta Ya! la denuncie. No les importa, la vida marcha igual.