El Ardi El Harti, profesor de Literatura Española del Barroco de la Universidad Mohamed V de Rabat, considera que la actual fijación del Ministerio del Interior marroquí con Ceuta y Melilla se debe a su papel de peones geopolíticos en el intrincado conflicto del Sahara Occidental El Harti, quien visitó el martes la localidad asturiana de Avilés para participar en un foro internacional, fue preguntado por el diario regional ‘La Voz de España’ sobre si Ceuta y Melilla formaban parte de la política interior de Marruecos. El académico afirmó que “Ceuta y Melilla se pueden utilizar como mecanismo de presión, pero la prioridad nacional es el Sahara”.
Instado a explicar la respuesta, El Harti aseguró que la cuestión saharaui es un pilar fundamental del sistema político y la sociedad marroquíes. “En España se dice que el Sahara es cosa del Rey y su corte, pero yo digo que no, une a todo el país.” Según aseveró, Marruecos se juega en la antigua provincia española “su estabilidad, su democracia y su desarrollo”.
Estas declaraciones se suman a numerosas voces que han asociado el jaleo levantado en los últimos tiempos por el país vecino respecto a Ceuta y Melilla (con anuncios de “marchas de liberación” incluidos), con las complicaciones surgidas en el Sahara Occidental.
Estas conexiones fueron reconocidas por el propio Gobierno español el mes pasado cuando, por boca del vicepresidente tercero Manuel Chaves, vinculó las restricciones impuestas por Rabat al tránsito de periodistas por la frontera ceutí con la situación en el Sahara Occidental. “Hay que ponerlo en el contexto creado por los acontecimientos del Sahara”, declaró.
Días después, el Congreso de los Diputados español condenó por unanimidad la violencia en el desalojo del campamento saharui de El Aaiún, aunque se evitó reprobar expresamente a Marruecos.
Transcurridas escasas horas, el Parlamento marroquí contestaba instando a su Gobierno, en sesión extraordinaria, a “reabrir el asunto de Ceuta y Melilla”.