Ceuta despidió a Ricardo Muñoz, el alcalde al que “quiso con locura”

El pueblo ceutí despidió ayer a quien fuera su alcalde en dos ocasiones y estuvo al frente de Ceuta en momentos tan importantes como el 23-F.

El Tanatorio recibió a numerosos ceutíes que quisieron dar el último adiós a Ricardo Muñoz. Amigos y políticos acompañaron a la familia en estos momentos tan difíciles.
En su último adiós estuvieron el presidente de la Ciudad y presidente regional del PP ceutí, Juan Vivas; el delegado del Gobierno, José Fernández Chacón; la consejera de Medio Ambiente, Yolanda Bel; el consejero de Fomento y secretario general del PP ceutí, Juan Manuel Doncel; el viceconsejero de Gobernación, Manuel Coronado; y el líder de los socialistas ceutíes, José Antonio Carracao, entre otros muchos. También estuvieron miembros de su partido como Emilio Carreira, o personas que trabajaron con él en su etapa como político, como Ramón Ruiz, Juan Antonio García Ponferrada, o el ex presidente Jesús Fortes.
Amigos de Muñoz recordaban a las puertas del Tanatorio aquellas tertulias en el Parador La Muralla a las que, además de él, acudían Eduardo de ‘La Esmeralda’, Paco o Pepe Cossío. “Allí se reunían en días no laborales para hablar de temas de actualidad”, comentaba uno de quienes decían tener la “suerte” de haberlo conocido. Los que estaban en la puerta también aseguraban que Ricardo Muñoz había sido “un excelente alcalde para su pueblo”. Lo definían como un político “campechano, dialogante y abierto, una buena persona que ha sabido estar en el cargo y fuera”.
Ramón Ruiz atendió a ‘El Faro’ para recordar que estuvo con Muñoz de concejal en el año 85  y durante 35 años o más de su vida ha sido “íntimo amigo” de él. “Le llamamos ‘animal político’, por la potencia que tenía. El fue alcalde justo el 23-F y tuvo una compostura gallarda, en todo momento estuvo en su puesto y nunca se movió de él”, manifestó. Ruiz aseguró que sólo puede recordar “cosas buenas, y no es porque cuando las personas se mueren siempre se dicen cosas bonitas, de él siempre se ha hablado bien porque era un gran alcalde, una gran persona y un gran ceutí. Ante todo, ha defendido a esta tierra mucho y, por lo tanto, los demás estamos muy agradecidos”.
Por su parte, Juan Antonio García Ponferrada recordó que llegó a Ceuta “justo cuando Ricardo Muñoz era teniente alcalde del último ayuntamiento predemocrático y viví cómo Alfonso Sotelo, antes de irse le dejó de primer teniente alcalde, algo vería en Ricardo cuando lo eligió”. García Ponferrada recordó que fue alcalde en 1978. “Hizo la transición y llevó al Ayuntamiento a las primeras elecciones democráticas. Luego volvió a ser alcalde con UCD, donde yo estaba de secretario de Relaciones Internacionales y Extranjería, y ya seguimos el contacto”.
En el ámbito personal, lo definió como “un ser entrañable”, y dijo que no tuvo la “fortuna” como Ruiz de tener su amistad, pero sí vivió momentos importantes. “Luego nos encontrado cuando yo formaba parte de PFC. Negociamos un acuerdo de gobierno siendo él presidente del PP y tuvimos mucho contacto”.
Además, García Ponferrada dijo tener un “gratísimo recuerdo” de Ricardo Muñoz, como cree que tendrá también el pueblo ceutí, que “le ha querido con locura porque ha sido un hombre prudente, con una intuición política increíble y un amor a su tierra grande. Es digno de recordar en estos momentos y con este tipo de detalles. Hablamos de un personaje comprometido con su tierra a todos lo niveles y que ha tenido una trayectoria que ha sido y es aplaudida por gran parte de los ciudadanos de nuestro pueblo”, concluyó.

Se despidió con la bandera de Ceuta sobre su ataúd

Ricardo Muñoz se fue con la bandera de Ceuta, la ciudad a la que ha servido durante muchos años y la que se ha llevado un buen recuerdo de él. Familiares, amigos y compañeros despidieron en la mañana de ayer a quien fuera presidente de Ceuta en dos ocasiones, un alcalde a quien definieron como una persona entrañable y gran trabajador.
El deán de la Catedral, José Manuel González, fue el encargado de oficiar el sepelio, que tuvo lugar a las doce del mediodía en el Tanatorio.
Una vez celebrado el sepelio, Muñoz fue incinerado en el Cementerio de Santa Catalina, donde se trasladaron sus familiares y algunos amigos, como Jesús Fortes.
Fueron también muchas las organizaciones que lloran la pérdida de Ricardo Muñoz, como el Centro de Hijos de Ceuta, que era como su segunda casa. Y es que en los años en que este Centro era un verdadero núcleo de citas y contactos entre el mundo político y social, Muñoz era una persona que pasaba también muchas hora en la sede que se encontraba en el popular edificio Trujillo.
El pasado sábado, día en que falleció Muñoz, el presidente de la Ciudad, Juan Vivas; el que fuera diputado por Ceuta Francisco Antonio González; y el ex presidente Jesús Fortes, también destacaron sus muchas virtudes y su gran labor en política.