Ceuta tiene una buena calidad del aire. Algo que se puede afirmar gracias al trabajo realizado desde la Estación de Calidad del Aire, desde donde se analizan todos los parámetros necesarios para dar esta calificación.
La Estación de Calidad del Aire de Ceuta está situada en la Autoridad Portuaria, que cede sus terrenos para poder tener una vigilancia del aire de la ciudad en un lugar estratégico y resguardado.
La central, que gestiona Procesa y pertenece a la Ciudad, garantiza la obtención de información fiable y comparable, que hace posible tomar medidas de reducción de emisiones si fuese necesario y ofrecer información pertinente al público a tiempo real a través de la web www.ceutaica.es.
¿Cómo se evalúa la calidad del aire?
La evaluación de la calidad del aire se realiza contrastando los valores medidos, calculados o estimados de los contaminantes frente a los niveles establecidos en la normativa europea para proteger la salud y el medio ambiente.
Estas estaciones además miden otros parámetros meteorológicos como la velocidad y dirección del viento, temperatura, humedad relativa, presión, lluvia y radiación solar, los cuales ayudan a la interpretación de los datos de concentración obtenidos.
“La calidad del aire en Ceuta es buena, mucho mejor que la de otras ciudades de la Península. Lo que peor llevamos es el tema de los coches. La gente debería coger menos su vehículo e ir andando, que la ciudad no es tan grande. En el tiempo que estuvimos confinados se notó una importante bajada en estos niveles por a reducción de la movilidad impuesta”, explica Luis Corrales Zapater, el técnico encargado del funcionamiento de esta central, a la que dedica su jornada laboral y parte de su tiempo porque, según comenta, se requiere de mucha atención para extraer, continuamente, los datos que se van obteniendo de las muestras recogidas en el aire, mandarlos a la central y trabajar con ellos para aportar las conclusiones.
El sistema por el que se obtiene la información es complejo. Esta estación dispone de analizadores y sensores que miden los contaminantes que marca la normativa en materia de calidad del aire, principalmente dióxido de azufre (SO2), óxidos de nitrógeno (NO y NO2), ozono troposférico, monóxido de carbono (CO), benceno y partículas en suspensión (PM10 y PM2.5).
A simple vista, la central no parece contener tal cantidad de tecnología, pero, en su interior, se encuentran los más punteros sistemas informáticos, equipos muy sensibles en los que cualquier mínimo cambio de temperatura puede alterar los resultados.
Estos equipos marcan los niveles, según lo que van recogiendo del aire. Las bombas absorben las partículas y el sistema filtra solo las que quiere analizar. El monóxido de carbono, que provocan, por ejemplo, los tubos de escape; el dióxido de azufre, que genera la central eléctrica cuando quema carbón, o el óxido nitroso, que expulsan los coches diésel, son algunos de los contaminantes que controla esta estación, una de las más avanzadas del país y un motivo de orgullo para Ceuta como ciudad comprometida con el medio ambiente.
Y qué hace PRocesa controlando eso?