La medida de acoger a 200 Menores Extranjeros No Acompañados (
MENA) en distintos puntos del país es valorado por el
Gobierno de Ceuta como “medida solidaria” que es, lo que demuestra que “no estamos solos”. No obstante resulta “insuficiente” ante la cantidad de menores que han terminado atrapados en nuestra ciudad. La vía más favorable sería el reagrupamiento familia, sobre eso habrá que seguir insistiendo, pero de no avanzarse se seguirá trabajando en los traslados al otro lado del Estrecho
como el ocurrido este pasado viernes a Islas Baleares. Los menores que han llegado a nuestra ciudad están repartidos entre distintos albergues y en las naves del Tarajal además del habilitado en Piniers. La Ciudad considera que ha respondido de la forma mejor que ha sabido y podido porque “vienen mil menores y han sido acogidos con lo que se tenía a mano. Queremos mejorar recursos extra de acogida y lo que se libere de menores en Tarajal que sea para los adultos para paliar, que no resolver, la situación de emergencia sanitaria. Además estamos fortaleciendo los servicios de todo tipo, tanto de seguridad como de limpieza”, ha concretado en su comparecencia de prensa el presidente de la Ciudad, Juan Vivas.
El problema de la atención a menores
Es un dato estimado, pero se cifra en unos 3 millones de euros al mes el gasto corriente que está suponiendo esta crisis provocada por la entrada indiscriminada de marroquíes a nuestra ciudad con motivo de la relajación de medidas en la frontera por parte de
Marruecos, acontecida entre el 17 y 19 de mayo. A ese montante económico se añaden las partidas ya presupuestadas para los gastos a los que se ha venido enfrentando la propia institución municipal. Ceuta tiene un grave problema con los marroquíes que quedan descontrolados en la ciudad pero también, sobre todo, con los menores. Esta misma noche se producía un enfrentamiento gravísimo en el pabellón Santa Amelia provocado por una
pelea multitudinaria entre marroquíes y subsaharianos que ha llevado al 061 a realizar hasta 50 asistencias.