Los habitantes de Ceuta y Asturias tienen menos probabilidades de sufrir hurtos en sus hogares según un estudio realizado por Kelisto.es. Al otro extremo del listado se encuentran Murcia, la Comunidad Valenciana y Cataluña. Las viviendas ceutíes ostentan un 0,2% de riesgo de sufrir este tipo de incidentes, seguida por Extremadura, Castilla y León, Galicia y Aragón, con 0,3%. Uno de los argumentos en los que se apoyan los resultados del reporte, apunta a la cantidad de población de la comunidad, sin embargo, no se apoya que exista una relación entre la renta media de los ciudadanos, y por tanto el valor del contenido de una vivienda, y la cantidad de estos delitos. "Resulta curioso el hecho de que la probabilidad de robo no está necesariamente ligada con la riqueza de dicha comunidad. De hecho, Murcia es la zona que más riesgo de robo presenta, pero también es una de las rentas medias por hogar más bajas, con 23.574 euros por núcleo familiar", argumenta Virginia Cordero, portavoz de Kelisto.es. En España, se registran más de 100.000 robos al año, con un coste medio por siniestro que ronda los 1.500€, pese a ello, el informe indica que el 30% de las viviendas españolas no cuentan con ningún tipo de póliza de hogar. La tendencia de los últimos años en cuanto a este tipo de delitos era menguante, pero los datos de 2018 han supuesto un repunte importante, incrementándose 1,79% respecto a 2017 con un total 107.012 siniestros. A pesar de la extendida creencia de que en verano hay más robos, la mayoría de los hurtos en viviendas se producen durante el primer y el último mes del año, durante el invierno. Solo 2 de cada 10 se producen en la temporada estival. Esta baja probabilidad no significa que se deba bajar la guardia, lo más sensato es cumplir con las
recomendaciones de los servicios de seguridad e instalar algún sistema de seguridad en la vivienda. La razón por la que los robos con fuerza en domicilios se incrementan en los primeros y últimos meses del año tiene que ver, curiosamente, con las horas de luz, tal y como ha explicado a Kelisto el Teniente Daniel Zorzo, miembro de la Unidad Técnica de la Policía Judicial y encargado de coordinar las investigaciones de la Guardia Civil: “en esos meses (primer y cuarto trimestre) es cuando menos horas de luz hay y, por lo tanto, al ser las noches más largas, es cuando la gente que se dedica a los robos (sobre todo los profesionales) tiene más tiempo para cometer los ilícitos”.