El centro, que hace tres años tenía tres líneas de Infantil, solo recibe 14 solicitudes de escolarización para septiembre
Los centros educativos de Ceuta publicarán el próximo lunes los listados de admitidos y excluidos en el proceso ordinario de escolarización para el año académico que comenzará en septiembre. El periodo de presentación de solicitudes ha venido marcado por una dinámica ya tradicional: la demanda de plazas excede la oferta de vacantes, según la información recopilada por este periódico en contacto con distintos centros, en los colegios concertados de la zona centro y la periferia y en algunos públicos como los CEIP Lope de Vega, Ortega y Gasset y Federico García Lorca.
Al margen de esta tónica habitual, llama la atención la situación del CEIP Príncipe Felipe, que parece convertirse en la última ‘víctima’ del caos general y cotidiano de la zona fronteriza en la que se encuentra.
El colegio, que hace tres años mantenía tres líneas de Educación Infantil, ya solo consiguió a duras penas llenar dos grupos por nivel en 2016 y en el proceso ordinario de escolarización abierto a finales de abril solamente ha recibido 14 solicitudes pese a contar con 50 plazas para recibir a niños de 3 años.
La Junta de Personal Docente alertó por última vez en noviembre de que “la actividad educativa de este centro se ve seriamente perjudicada al encontrarse en medio del caos que tiene lugar en sus alrededores, ocasionado por largas colas de porteadores y vehículos del país vecino ante la falta de presencia policial para paliar sus efectos”.
El Claustro del CEIP Príncipe Felipe exigió por escrito a la Delegación que se tuviera en cuenta su existencia a la hora de plantear soluciones para la problemática fronteriza. En concreto, pidió que se despejasen de porteadores todos los accesos al centro y se mejoraran las condiciones higiénicas y de salubridad de sus inmediaciones, asegurando la presencia de efectivos de las Fuerzas de Seguridad durante toda la jornada escolar “para facilitar las entradas y salidas de todos los miembros de la comunidad educativa”.
La respuesta de la Administración no ha llegado o ha llegado tarde y sin credibilidad: la población de la zona de influencia prefiere matricular a los pequeños en el CEIP Reina Sofía o en el ‘Ciudad de Ceuta’, ubicado en la antigua Biblioteca del Polígono.
Años esperando medidas efectivas en el entorno
La comunidad educativa del CEIP Príncipe Felipe lleva años reclamando con poco o ningún éxito medidas para evitar que el caos fronterizo haga que padres y madres lleguen tarde a recoger a sus hijos y que el Claustro se tenga que hacer cargo de los menores excediendo en muchas ocasiones sus horas de obligada permanencia en el centro; que el desarrollo de las actividades extraescolares se vea entorpecido; que se acumule “gran cantidad de basura, micciones, heces e incluso ratas”; o que el profesorado se vea obligado a sortear toda clase de obstáculos para llegar a su puesto de trabajo a tiempo.
Vivir en la zona de influencia, clave para el centro deseado
La ‘zona de influencia’ del CEIP Príncipe Felipe incluye el área comprendida entre el cruce de la avenida Martínez Catena con la carretera de acceso a las viviendas de Loma Colmenar hasta el límite oeste de calle Rallo-Romero y desde el cruce de la calle de la Urbanización de ‘Las Caracolas Azules’ con calle Príncipe Sur y perímetro fronterizo.
Que el domicilio familiar esté situado dentro del área de influencia en la que está ubicado el centro solicitado es uno de los factores que más puntos concede en el proceso de escolarización (8), como la existencia de hermanos matriculados o padres, madres o tutores legales trabajando o hermanos matriculados en el colegio deseado.
Las más de mil vacantes que ofertan los centros públicos y concertados para el primer nivel de Educación Infantil para el próximo curso son, a tenor de las solicitudes recibidas en el plazo ordinario, suficientes para garantizar una plaza a todos los pequeños escolarizables pero no en el centro preferido.
La demanda supera a la oferta en todos los concertados, que tienen 50 (Beatriz de Silva, La Inmaculada, San Agustín y San Daniel) ó 25 vacantes (Santa María Micaela y Severo Ochoa), según el caso. También en los CEIP Ortega, Lope y García Lorca.Geográficamente, la demanda de plazas en la zona centro supera a la oferta, por lo que se podrían habilitar unidades extra.