El sindicato solicita que la Ciudad aporte la partida si no lo hace el Estado ya que su trabajo es “estructural e imprescindible”
Comisiones Obreras (CCOO) se reunió ayer con los trabajadores del Convenio de Inmigrantes para intentar buscar soluciones al problema al que se enfrentan al finalizar sus contratos el próximo 31 de diciembre y no existir previsión de renovarlo.
Este colectivo está formado por 24 trabajadores, cuatro de los cuales han ganado un proceso judicial y tendrán que ser readmitidos por la Administración o recibir una indemnización de esta. A la reunión acudió “el 70 por ciento” de los empleados, “ya que algunos no han podido venir, pero están todos a una”, explicó el responsable del sindicato en la Ciudad, José Antonio López.
Tal y como indicó el sindicalista en declaraciones a este medio, la Ciudad ha comunicado a los trabajadores que no renovará el Convenio debido a que el Estado no envía la partida presupuestaria correspondiente y la Administración local no puede seguir manteniendo un año más este servicio. Este año fue la Ciudad la que aportó este dinero para mantener el servicio debido a que el Estado ya no lo envió, por lo que el sindicato pide que haga lo mismo para el próximo año. Los trabajadores dicen que la Ley de Extranjería obliga a tener este Convenio.
El sindicato considera que aunque es personal de un programa de inmigración “están haciendo un trabajo que es en un 99 por ciento estructural de la Ciudad y que si no lo hacen ellos no lo hacen otras personas puesto que no hay”. López explicó que aunque el programa finalista viene de Madrid, aquí se realizan otras funciones “que para nada tienen que ver con la inmigración, todo está relacionado con servicios sociales”.
En esta línea y entendiendo que este trabajo es “imprescindible”, el sindicato dice que hay que buscar “por todos los medios” que se cree esta partida de algo más de 800.000 euros. Para ello, solicita una reunión con el consejero de Economía, Hacienda y Recursos Humanos, Guillermo Martínez, para pedir una solución. Para conseguirla, aseguran que llegarán “hasta donde haya que llegar, vamos a movilizarnos, al margen de ir paralelo con información del gabinete jurídico de CCOO, centralizado en Madrid”.
El sindicato lamenta que los trabajadores tienen una “preocupación brutal”. En la plantilla hay trabajadores sociales, psicólogos, animadores y educadores, y realizan funciones de taller, programas de familias, reinserción social, “labores que nada tienen que ver con lo que sería un convenio de inmigrantes, sino que se da un servicio totalmente estructural, por lo que su trabajo es necesario y no se puede prescindir de este”.
CCOO considera que las barriadas “más necesitadas” van a echar en falta estos servicios si finalmente se prescinde de ellos.