CCOO desdice el aumento de personal en Ingesa con el cupo de sindicalistas

La reacción de los sindicatos no se ha hecho esperar. Ángel Lara, secretario general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO, puso ayer en entredicho la cifra lanzada por Fernando Pérez-Padilla, director territorial, sobre el incremento de profesionales en Ingesa entre 2011 y 2013.

El máximo representante de la sanidad asistencial contabilizó 913 efectivos en 2011 y 1.012 en 2013 , es decir, un aumento de 99 trabajadores.
El comisionista contradijo los datos presentados por Pérez-Padilla en base al artículo 39 del Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) por el cual, para empresas públicas con plantillas de entre 751 y 1.000 trabajadores, corresponden 21 delegados de personal, es decir, sindicalistas. Sin embargo, a aquellas con más de 1.001 efectivos se les asigna dos por cada 1.000 o fracción.
“En las elecciones sindicales de marzo de 2011, cuyos resultados quedan registrados en la Delegación del Gobierno, se eligieron 23 delegados porque en la plantilla había como mínimo 1.002 trabajadores aunque eran más”, explicó este representante de los trabajadores. Ya en noviembre de 2011, añadió, “66 trabajadores del Hospital Militar se incorporaron al equipo del Hospital Universitario, por tanto la plantilla ascendió a unas 1.070 personas”.
Las nóminas de los profesionales transferidos de las instalaciones de O’Donnell a las de Loma Colmenar, “fueron pagadas por el Ministerio de Defensa durante más de un año” tras su integración en Ingesa, de modo que CCOO atribuye el aumento presupuestario en el Capítulo I a ese sector de la plantilla, “que trajo consigo un mayor volumen de pacientes que hasta ese momento eran atendidos en el Hospital Militar”. Lara sumó los complementos ligados a la antigüedad de toda la plantilla al Capítulo I.
Además, Lara pidió a los actuales director territorial y gerente que cuenten con su gestión a partir de 2012, año en el que la directiva local ocupó su cargo. “El intervalo real de incrementos de personal fue entre 2007-2008 y 2011 cuando el número de efectivos se proyectó con la apertura del Hospital Universitario”, subrayó Lara por lo cual concluyó que la ampliación con Pérez-Padilla y Manuel Cabeza fue “nula”.
“En el periodo 2012-2013 no se sustituye prácticamente nada, se dejaron sin cubrir la mayoría de las plazas que quedaron vacantes. Tampoco cubrieron las plazas estructurales, pero sí se dedicaron a cubrir efectivos donde habitualmente no había nadie con contratos por necesidades del servicio por unos plazos de permanencia que incumplen la ley”, criticó este representante de la Federación de Sanidad de CCOO.
La reducción de jornadas eventuales de 2011 a 2013 en 14.500, estimada por Pérez-Padilla, sirvió a CCOO como ejemplo de que en el Área Única de Ceuta existe “menos empleo y sustituciones”. En cuanto a la OPE, Lara aclaró que el mérito debe reconocerse a las directivas anteriores y aseguró que si tarda seis o siete años en materializarse, “es porque hay algo que no funciona en Ingesa”.
En cuanto a la acusación de Pérez-Padilla sobre los representantes de los trabajadores porque generan “alarma social” con sus declaraciones, Lara replicó que Ingesa es la que genera ese clima cuando habla de 15.000 jornadas eventuales menos “porque son menos profesionales prestando el mismo servicio sanitario a inclusa más población que, por esta razón, no alcanza los estándares de calidad”.