Carmen Kimatrai Salvador es de Ceuta, tiene 29 años y trabaja en un supermercado. Pasó por el colegio, el instituto y realizó diversos módulos. "De cerámica, jardinería, informática y mucho más". Tiene Síndrome de Down, algo que no la define, pues según clama: "No soy solo un cromosoma de más".
Su historia se ve ahora reflejada en un vídeo que ha elaborado junto a su prima, Carlota de la Guardia. Esta última, profesora en el Colegio La Inmaculada, ha mostrado la pieza a los alumnos aprovechando la Semana de la Diversidad Funcional celebrada en el centro: "Han aprendido mucho", cuenta.
El relato que llegó a los niños del colegio ceutí no es otro que el de "una chica normal", que con su esfuerzo ha llegado a conseguir trabajo en el supermercado Carrefour: "El día de la firma del contrato, fue el más feliz de mi vida, como cuando otros sacan una buena nota en un examen que llevan mucho estudiando. La recompensa al esfuerzo", cuenta.
A Kimatrai le gusta "salir a comer fuera, la navidad, disfrazarme, hacer deporte, hacer cosas diferentes y divertidas". También "ir a la playa, ponerme guapa, bailar, celebrar los cumples".
Además, le "hace ilusión salir en la tele" y es "una excelente 'tita'" con sus seis sobrinos, que la "adoran". A ella le encanta cuidar de ellos y también "posturear". Que casualidad, "como a ti", apostilla.
Y es que, su mensaje es así de sencillo: "Son más nuestras similitudes que nuestras diferencias, date la oportunidad de conocernos. No soy un cromosoma extra, soy mucho mas".
Se suma a este mensaje su prima, de la Guardia, que subraya que "el Síndrome de Down no es una enfermedad" y que con esfuerzo las metas se alcanzan: ". Mi prima Carmen tiene un cromosoma adicional que le ha dado unas características únicas de ser, crecer y ascender. Tiene los mismos retos que el resto. Estudiar y trabajar y los ha cumplido de manera diferente y en tiempos diferentes. A mi me costaba más aprobar matemáticas que lengua. Simplemente hay cosas que se nos dan mejor a unos que a otros".
Y, de hecho, a la joven se le dan bien muchas, a juzgar por el premio que recibió en el supermercado en el que trabaja, coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer: "Está muy ilusionada".
Mi felicitación para Carmen, que como bien dice, no es sólo un cromosoma mas, sino el producto de su propio esfuerzo y trabajo. Afortunadamente hoy día cada vez son mas las personas que a pesar de su condición de haber nacido con un cromosoma extra, son capaces de llevar una vida autónoma y de tomar sus propias decisiones. Dentro del síndrome de Down, igual que los no Down, cada persona es diferente, con capacidades diferentes, y cuando se trabajan esas capacidades y se potencian y estimulan adecuadamente, los resultados pueden ser muy satisfactorios, como es el caso de Carmen. Lamentablemente también hay personas Down cuyas capacidades están mas limitadas, pero eso no les hace menos personas.