Cáritas destinó el año pasado el 57% de sus ayudas a alimentos

Cada mes auxilió a 862 familias. La mayor parte de su presupuesto procede de los 170.000 euros del convenio con la Ciudad.

El presupuesto que gestionó Cáritas el año pasado superó los 269.000 euros, según los datos recogidos en su Memoria. La mayor parte de este dinero se destinó a ayudas para alimentación. En concreto, fueron 155.505 euros, el 57% del total de los recursos que la ONG de la Iglesia administró en Ceuta para auxiliar a personas acosadas por la crisis económica.
Estas cifras están incluidas en el informe global de Cáritas de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, donde en conjunto los números son mucho más altos, tanto en presupuesto como en las acciones llevadas a cabo. En esa Memoria, los recursos gestionados alcanzan lo 2.679.560 euros, donde están incluidos los 269.000 euros que administraron los responsables de la ONG en nuestra ciudad.
En total, la acción de Cáritas en Ceuta permitió asignar 10.344 ayudas a familias. Un total de 862 hogares recibieron el apoyo de esta ONG cada mes a lo largo del año pasado.
Después de alimentación, la siguiente cuantía de mayor tamaño es la destinada al pago de alquileres y alojamientos de urgencia. Para este fin Cáritas destinó 27.102 euros. Si a esa cantidad se suman los 15.353 euros de las ayudas para el pago de luz y agua, se obtiene los más de 42.000 euros empleados en atender un total de 238 peticiones a lo largo del año.
El apartado de Material Escolar y Varios fue tercero en cuantía. A este fin se destinaron 19.878 euros. El concepto ‘varios’ engloba el dinero destinado a la adquisición de medicamentos o al pago de transporte, especialmente del barco para acudir, por ejemplo, a una cita médica en la península.
Para atender las peticiones de productos de higiene personal y doméstica Cáritas reservó el año pasado 6.000 euros. La cifra es muy cercana a los 5.703 euros de gastos de farmacia y óptica.
Estas cifras, correspondientes a las partidas más cuantiosas, son las que suman la mayor parte de los 269.000 euros que Cáritas administró en nuestra ciudad a lo largo del año pasado para socorrer a familias y personas en situación de riesgo de exclusión social.

Ciudad, Bankia y herencias
La mayor cuantía reflejada en el apartado de ingresos de la Memoria de Cáritas en Ceuta referida a 2015 corresponde al convenio que la ONG firmó con la Ciudad. Sin embargo, no fue su única fuente de ingresos. El año pasado también contó con la financiación de Bankia para un proyecto de ayuda a familias en situación de emergencia social. Además, Cáritas recibió más de 9.000 euros procedentes de herencias sin beneficiarios.
Los 170.000 euros del acuerdo con la Administración local se destinaron a la adquisición para su posterior distribución de productos básicos de alimentación, artículos de limpieza, material escolar, medicamentos y transporte escolar, además de servir para ayudar al pago de facturas de luz, agua y alquiler.
Por otro lado, el acuerdo con Bankia ha permitido financiar con 10.000 euros un proyecto de ayuda y apoyo a familias en situación de emergencia. A cambio de asistir a un total de cinco sesiones, los beneficiarios han recibido un total de 500 euros, a razón de 100 euros por sesión. En estas reuniones los destinatarios de la ayuda obtuvieron apoyo psicológico y emocional.
Las herencias sin beneficiarios permitieron a Cáritas ingresar 9.171 euros el año pasado. Esta cantidad forma parte de la valoración conjunta del patrimonio dejado por diversas personas que fallecieron sin tener herederos. La ley da derecho a las ONGs a optar a una parte de este patrimonio, que se reparte entre los solicitantes que cumplen las condiciones necesarias. La siguiente partida, casi tan importante como las herencias sin beneficiarios, fue la correspondiente a donaciones. Por este concepto Cáritas ingresó 9.000 euros, que recibieron tanto de empresas como de particulares.
Finalmente, gracias a diferentes colectas llevadas a cabo a lo largo del año, como la del Corpus Christi o la realizada en Jueves Santo, la ONG obtuvo 2.421 euros.

Los otros ‘ingresos’
Los ‘ingresos’ de Cáritas no son sólo en metálico. También recibe aportaciones en forma de colaboración. Es el caso de un abogado que asesora a quienes acuden a la ONG en busca de ayuda legal. Este profesional, que es la base del proyecto denominado ‘El Defensor del Débil’, pone sus conocimientos a disposición de Cáritas, de manera altruista, para aconsejar a las personas a las que socorre la ONG sobre los pasos a seguir en cada situación. Este año ha atendido media docena de demandas de información y asesoramiento jurídico.
Otros colaboradores, como uno que venía ayudando en labores de transporte a lo largo de los últimos años, ha acabado siendo contratado. Trabaja para Cáritas conduciendo una furgoneta que ha sido donada a la ONG.

Otros números que no están en el presupuesto

La Memoria de Cáritas no sólo contiene cifras de gastos e ingresos. También otros números que describen la actividad de la ONG en distintas ámbitos a lo largo del año pasado. El proyecto de ayudas a familias en situación de Emergencia Social, por ejemplo, se desarrolló de septiembre a noviembre y en ese periodo participaron 20 familias repartidas en dos grupos en la zona del extrarradio y zona centro. Más números: En los siete primeros meses de 2015  se realizaron un millar de visitas domiciliarias a todos los asistidos por Cáritas y se renovaron los informes sociales y la documentación. Para ello hubo que contratar temporalmente a dos trabajadoras sociales que estudiasen y verificaran la realidad social de las personas acogidas por las diferentes Cáritas Parroquiales.
También se realizaron labores de acompañamiento a personas mayores en la residencia Nazaret. En esta ocasión, la ONG no tuvo que asumir coste alguno porque esta acción se ha realizado con un grupo de cinco voluntarias que dos veces por semana han visitado a los ancianos, han estado con ellos y han llevado a cabo actividades lúdicas.
Sí ha tenido coste el taller de labores y costura en la casa-residencia de las Hermanas Adoratrices, en el que ha participado una veintena de mujeres acogidas. Además del gasto para adquirir material, ha habido que pagar a la monitora. En cambio, el taller de alfabetización en la parroquia San José ha sido impartido por una voluntaria que ha dado clase a 35 mujeres.
Además, la presencia de Cáritas se percibió el año pasado con su participación en el ‘Circulo de Silencio’ en memoria de todos los refugiados que han perdido la vida intentando llegar a nuestro país. También participó la ONG en las campañas de sensibilización y concienciación en medios de comunicación sobre la precaria situación por la que atraviesan muchos de nuestros conciudadanos.