Las ayudas a la dependencia experimentarán una subida para el próximo año 2024. Una noticia de la que se verán beneficiadas las cerca de 500.000 personas que reciben esta prestación tanto en Ceuta como en el resto del territorio nacional.
El aumento viene regulado en el Real Decreto 675/2023 y dependerá del grado de dependencia que tenga la persona que requiere los cuidados en cuestión.
En cuanto a este Real Decreto, el incremento de esta prestación viene regulado en el artículo 13 del escrito, donde se establecen los límites, tanto máximo como mínimo, de las ayudas económicas a la dependencia para el año 2024.
Por esta razón, las cuantías de esta ayuda serán las siguientes:
Para la prestación económica por cuidados en el entorno familiar la prestación por el primer grado se percibirán 180 euros; 315,90 serán para los del segundo nivel; y para el tercero la cantidad será de 455,40 euros.
Asimismo, para la prestación de asistencia personal, el contante será de 313,50 euros para el primer grado; y 747,25 para el segundo y el tercero.
Por último, para la prestación económica vinculada al servicio, el dinero que percibirán las personas beneficiarias de primer grado será de 313,50 euros; de 445,30 para el segundo nivel; y de 747, 25 euros para el grado III.
Clasificación de los grados de dependencia
En cuanto a los grados, estos se clasifican en tres niveles. El Grado I se asigna a personas que necesitan ayuda al menos una vez al día para actividades básicas o apoyo intermitente para su autonomía personal.
El Grado II, dependencia severa, se otorga a quienes requieren asistencia dos o tres veces al día para actividades cotidianas, pero sin necesitar un cuidador permanente.
Finalmente, el Grado III, gran dependencia, se aplica a individuos que necesitan ayuda varias veces al día y dependen continuamente de otros debido a la pérdida total de autonomía física, mental, intelectual o sensorial.
La Ley de Dependencia
La Ley de Promoción de la Autonomía y Atención a las Personas en situación de dependencia, comúnmente llamada ‘Ley de Dependencia’, garantiza la atención a las personas que sufren una reducción o pérdida de su autonomía física, mental, intelectual o sensorial.
Esto les lleva a necesitar la asistencia de otras personas o apoyos significativos para llevar a cabo las actividades básicas de la vida diaria.