Un total de 75 peregrinos viajan con la Hermandad para disfrutar de un fin de semana de “auténtica devoción rociera”, dicen desde la organización La Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Ceuta partió ayer hacia la Aldea Almonteña para ponerse bajo las plantas de la Virgen del Rocío en su misa anual.
Un total de 75 peregrinos viajan con la Hermandad para pasar un fin de semana de “auténtica devoción rociera”, tal y como informaron desde la organización.
Los peregrinos se marcharon en el ferry de las tres y media de la tarde y llegaron al Rocío aproximadamente a las nueve de la noche.
Al llegar al Rocío comenzaron los actos religiosos previstos. Así, a las doce de la noche se rezó el Santo Rosario ante el Simpecado en la Cada de Hermandad.
Para hoy hay varios actos. El primero de ellos será a las doce del mediodía, cuando está previsto que los miembros de la Hermandad Matriz de Almonte reciban a los ceutíes en sus dependencias para enseñarles la Casa Museo de Almonte.
Ya a las ocho de la tarde celebrarán juntos la Santa Sabatina de los sábados, y ya por la noche en la Casa de Hermandad se realizará un homenaje a los almonteños que ayudaron a esta Hermandad en sus inicios.
Mañana a las 10:00 horas tendrá lugar la celebración de la Misa ante la Virgen del Rocío. El Coro de la Hermandad será el encargado de cantar la Solemne Misa ante su Pastora Almonteña.
Al finalizar la misa, los peregrinos partirán hacia Medina Sidonia (Cádiz), donde les espera David Gutiérrez, antiguo director espiritual de la Hermandad. Allí compartirán con él un almuerzo junto a miembros de la Hermandad de la Pollinica. Además, visitarán la nueva parroquia de David Gutiérrez.
Este viaje tiene actos muy esperados por los peregrinos ceutíes, desde llegar a la Aldea Almonteña y volver a respirar el ambiente rociero, hasta la Solemne Misa, destacando también el reencuentro con David Gutiérrez, que en el mes de junio se marchó a Medina Sidonia para continuar su labor en la Iglesia en la parroquia de San Juan de Dios, y como delegado episcopal para el Patrimonio Artístico de la Iglesia, nombrado por el obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza Boy.
El viaje finalizará volviendo en el ferry de las 20:00 horas, concluyendo así una experiencia que los peregrinos recordarán siempre.