Espíritu de acudir al fuego, espíritu de disciplina y espíritu de combate. Son tres de los doce que forman el Credo Legionario, esa lista de máximas que acompaña la vida de todo integrante de La Legión y que llevan conviviendo 16 años con la cabo Manar Benakhlifa Miludi, el mismo tiempo que forma parte del Tercio Duque de Alba II de La Legión de Ceuta. Ella es una de las protagonistas del calendario que ha realizado el Ejército de Tierra para 2019 y que está ilustrado con mujeres militares con Valor Reconocido tras combatir en primera línea de fuego.
Agosto: ese es el mes que llevará su imagen. Una fotografía realizada en Ceuta por el teniente coronel José Joaquín Milans del Bosch, cuya elección fue recibida con gran honor. Esta semana saltaba a los medios de comunicación esta noticia, que la cabo Benakhlifa reconoce que recibió con “alegría” porque es “algo muy grande para cualquier militar”. Hoy FAROTV ha querido saber algo más de quien está detrás de algo más que una fotografía.
“Mis superiores me dijeron si me apetecía porque era voluntario, tenía Valor Reconocido de hace ya años pero me lo ofrecieron y me pareció una buena idea, y como era en honor a dos compañeras militares que habían fallecido era la mejor manera de aportar algo de mí”, explica emocionada la cabo.
En el Tercio los compañeros de la cabo Benakhlifa se unieron a esa alegría compartida. Su familia, cuando se enteró de la propuesta de aparecer en el calendario para 2019, le animó a que formara parte. “Lo recibieron con alegría, me dijeron que era un honor, una gloria... Mis compañeros lo supieron cuando salió el calendario”, rememora.
La recepción a todas las protagonistas por parte de la ministra de Defensa, Margarita Robles, supuso uno de esos momentos en la vida que no se olvidan.
“Fue una experiencia única, conocer a la ministra, que te felicite personalmente y conocer a las demás compañeras... una alegría”, detalla ante el monumento en honor a La Legión situado en pleno centro de la ciudad. A cada una le reconocieron su valor. En el caso de la cabo Benakhlifa fue por su papel cuando se encontraba destinada en Irak y sufrió una emboscada enemiga.
Ella respondió con fuego a una emboscada enemiga en un puente de Diwaniya, en Irak, mientras llevaba a cabo una patrulla de reconocimiento. Al concluir la Guerra del Golfo, las tropas aliadas mantuvieron su despliegue en Irak para apoyar a las autoridades en la transición. España aportaría 1.300 militares, permanecieron en la zona hasta finales de mayo de 2004.
En esa emboscada los militares españoles se vieron atrapados por enemigos, entre ellos estaba la cabo Manar, con solo 19 años de edad y por aquel entonces soldado. Estaba destinada en La Legión de Ceuta y agregada al Tercio 4º de la Legión en Ronda para esa misión, como traductora de árabe.
“Fue un día normal en una patrulla, nos vimos sorprendidos en una emboscada por unos insurgentes. Tuvimos que repeler el fuego como pudimos, reaccionar lo más rápido posible. El miedo lo dejas atrás, somos militares antes de todo y en cero coma ese miedo desaparece. La Legión tiene ciertos espíritus y en momentos de misión se reflejan mucho el espíritu de fuego, de compañerismo y de combate... salen solos. Cualquier misión a la que vayamos te puedes arriesgar pero somos militares”.
Después llegó el momento de contarlo a la familia, de que supieran lo que había sucedido. “No les conté nada en el momento, cuando llegué a España sí. Lo normal que te dicen es que no vayas más a otras misiones, pero después de esa fui a dos más e iré a las que sean necesarias”.