El delegado del Gobierno es “una bomba de relojería” para el futuro de la ciudad autónoma si continúa en la responsabilidad que desempeña desde hace ya más de dos años.
Así lo denunciaron ayer en rueda de prensa Mohamed Ali, Juan Luis Aróstegui y Mohamedi Maanan, tres de los diputados del primer grupo de la oposición en la Asamblea, la coalición Caballas, que comparecieron ante los medios para “exigir” a las Administraciones Públicas “un cambio radical de política de Seguridad Ciudadana en particular y de políticas en general”.
Los últimos sucesos violentos acontecidos en el Príncipe, que durante la madrugada del viernes de la semana pasada tuvieron en el asesinato de un tiro en el corazón de Munir M.M., de 20 años, su exponente más dramático, llevaron a los localistas a dar una rueda de prensa para volver a cargar contra las “bravuconadas” del delegado y contra sus “grandes titulares”, que a juicio de la coalición contrastan con su “nula eficacia para crear un clima de seguridad aceptable en Ceuta”.
Los portavoces de Caballas anunciaron que en el próximo Pleno, el martes de la semana que viene, instarán a la Corporación a consensuar y a aprobar una declaración institucional para reclamar ese cambio y apoya la 'Marcha contra la inseguridad' que recorrerá la ciudad desde los alrededores de Sidi Embarek hasta la Plaza de la Constitución el jueves de la próxima semana, 10 de abril.
“Llamamos a todos los ceutíes a que se sumen para lograr que los últimos sucesos marquen un antes y un después y para acabar con esta intolerable cadena de incidente que vemos semana tras semana ante la pasividad de la Delegación”, apuntó Mohamed Ali.
“Insultar y amenazar”
Aróstegui pidió a toda Ceuta que reaccione para enfrentarse a “el mayor problema, el problema, de Ceuta”. “La ciudad entera debe lamentarse junta, no solo los musulmanes o el Príncipe, por lo que sucede en esa barriada porque dar seguridad y estabilidad a Ceuta pasa por entendernos y darnos afecto mutuo, no sólo por no insultarnos”, argumentó el político localista.
Desde su punto de vista eso, “insultar” y “amenazar”, es lo que único que ha hecho el delegado desde la Plaza de los Reyes. “No puede seguir un minuto más en su puesto porque su discurso para hooligans de extrema derecha demuestra que no entiende esta ciudad y que es una bomba de relojería para ella”, avisó Aróstegui, que también tildó de inaceptable el “silencio” de la Dirección Provincial del Ministerio de Educación tras la muerte asesinado de uno de sus alumnos.
“El divorcio entre la dinámica social y las instituciones nos aboca a un fracaso de imprevisibles consecuencias y esta muerte ha causado un tremendo impacto social ante el que la Dirección Provincial no ha hecho ni dicho nada y ante el que la Ciudad ha respondido tarde con un minuto de silencio”, remarcó Aróstegui, que anteayer sí vio en directo “la ira contenida y las lágrimas de cientos de personas honradas y de bien”.
“Me hubiese gustado que el delegado hubiese estado allí, en un acto sencillo, necesario e importante que el IES Siete Colinas desarrolló con muy buen hacer y en el que un profesor se preguntó con acierto cómo puede no conmovernos que maten a tiros a un chaval”, lamentó.
Un “Gobierno de Berlanga” que está “aterrorizado”
Ali y Aróstegui presentaron ayer la decisión de concederle el título de policía local de Honor al delegado como propia de “un Gobierno de Berlanga en pleno siglo XXI que da vergüenza ajena y que sobra". "Ahora le van a dar a la Comandancia General la Medalla de la Ciudad porque eso es lo que le preocupa, aplaudirse y distinguirse a ellos mismos”, censuró Aróstegui. Ali, por su parte, dijo que “González Pérez representa el ala dura, de extrema derecha del PP, y Vivas quiere paz social hasta las elecciones, lo que condiciona la política de la Ciudad, que aterrorizada ni se plantea cuestionar nada para no enfadarle”.