Amgevicesa quiere pedir título de ESO en 7 categorías de sus nuevas bolsas

El presidente del Consejo de Administración de Amgevicesa, Yamal Dris, publico ayer en el BOCCE el Decreto con el que dio por definitivamente anuladas las bolsas de trabajo convocadas por la sociedad municipal en 2018, que con más de 7.000 aspirantes presentados nunca llegaron a baremarse del todo, y abrió la puerta a la convocatoria de unas nuevas, procedimiento para el que la empresa espera la respuesta de los sindicatos a la propuesta de bases que se les hizo llegar el año pasado.

El Gobierno de Ceuta dice querer conseguir “una rápida asignación de recursos humanos a los servicios mediante la gestión ágil y eficaz de las bolsas estableciendo unas normas de funcionamiento y regulando un sistema de gestión transparente que permita un control efectivo interno desde el Área de Recursos Humanos, representantes sindicales, así como externo por las personas interesadas”.

Dicha voluntad se traduce, según el borrador de bases elaborado por la administración, en la introducción de requisitos de acceso más estrictos que los estipulados en 2018, en la inclusión de una ‘nota de corte’ de 40 puntos sobre 100 y en la obligación de “autobaremar” las solicitudes en caso de errores graves como falsedad documental.

Amgevicesa propone exigir el título de graduado en Secundaria como formación mínima para acceder a las bolsas de las categorías de operador del 112, taquillero, asistente de custodia o mantenimiento, conductor de grúa, controlador de la zona azul o auxiliar administrativo.

Solamente para dos tipos de puesto, auxiliares de aparcamiento y de servicio-control, bastaría con acreditar haber concluido estudios primarios.

El baremo prevé dar hasta 75 puntos por experiencia laboral (uno por cada 30 días de contrato laboral en Amgevicesa en la categoría y especialidad a la que se opte; medio en otras administraciones y 0,2 en el sector privado); hasta 20 puntos por formación adicional al margen de la mínima exigida como requisito; y un máximo de cinco por otros méritos como tener carné de conducir A1 ó A2 ó B; el nivel B1 en ingles, francés o árabe; o el Certificado de Aptitud Profesional.

La experiencia, primer criterio de desempate

La propuesta de bases de Amgevicesa para sus nuevas bolsas de empleo prevé que el Tribunal deberá elaborar en no más de 6 meses los listados para cada una de las categorías ordenando de mayor a menor a los aspirantes en función de la puntuación obtenida por aplicación del baremo. Los empates que se pudieran producir se resolverán “en función de la mayor puntuación obtenida en el apartado de experiencia laboral” y si persistiera, por la mayor puntuación en el apartado de formación y en última instancia en el de “otros méritos”. Sólo entonces se tendría en cuenta mayor edad, mayor tiempo de demanda de empleo o discapacidad.

“Exclusión” en caso de renuncia injustificada a una oferta

Las bases propuestas por Amgevicesa para la gestión de sus nuevas bolsas prevén que cuando se produzca una vacante temporal en la plantilla se cubriría por el personal inscrito de acuerdo con un llamamiento “siguiendo rigurosamente el orden establecido”.

La vacante que sería ofertada al primer aspirante sin contratar, que al expirar su contrato volvería a ocupar en la lista el puesto que le correspondía originalmente, quedando disponible para un nuevo llamamiento “hasta que se cumpla el máximo de tiempo contratado legalmente establecido”.

Cuando la vacante ofertada sea por un periodo superior a dos meses se ofertará inicialmente al primero de la lista “y sucesivamente a los siguientes aunque estuvieran contratados”. En caso de que alguno de ellos la aceptara, la vacante producida se reasignaría siguiendo el procedimiento ordinario dentro de la categoría.

La renuncia “injustificada” conllevaría “ la exclusión de la lista”. A estos efectos se entenderían como justificados, entre otros motivos, “los casos de enfermedad, cumplimiento de un deber de carácter público inexcusable y bajas o permisos de maternidad.

Dos años de vigencia

Las bolsas de trabajo tendrán una vigencia de dos años a partir de la fecha de la publicación definitiva de cada una de ellas.

En el supuesto de que cumplida la fecha de vigencia estuvieran en fase de renovación quedarían prorrogadas “por un periodo máximo de un año”, de acuerdo con el borrador propuesto por la empresa a los sindicatos.