El franciscano Manuel Corullón estaba citado este martes por la tarde en la ermita de San Antonio para la presentación en Ceuta del Año Jubilar en Marruecos 2019. Los feligreses de la ermita del Hacho le esperaban pero el bloqueo fronterizo dejó ‘atrapado’ a este fraile custodio de la Custodia de los Santos Mártires de Marruecos, que llegó a tardar hasta dos horas en cruzar a Ceuta. A pesar de que su propósito fue el de cruzar a nuestra ciudad, esto casi le resultó imposible. Sin embargo, y a pesar del bloqueo y acumulación de personas que intentaban atravesar la frontera, finalmente parece que se produjo el milagro y fray Manuel llegó a Ceuta para ofrecer una exposición de los actos programados para el próximo año. La propia Cofradía de San Antonio informó a este medio que, ante la aglomeración de coches, el franciscano había optado por desistir de su intento de cruzar a Ceuta. Sin embargo, fue tal su deseo de exponer todos los detalles de la celebración del Año Jubilar, que fray Manuel esperó pacientemente hasta que pudo pasar la frontera con su vehículo y, finalmente, la Cofradía de San Antonio pudo celebrar los actos previstos, aunque con un considerable retraso.
Fray Manuel estuvo retenido por la fuerte aglomeración de vehículos en Marruecos
El Año Jubilar en Marruecos tendrá lugar el próximo año y está previsto que el papa Francisco visite el vecino país entre el 30 y 31 de marzo, concretamente las ciudades de Rabat y Casablanca. Los actos con motivo de esta celebración se desarrollarán entre el 16 de enero de 2019 y el 16 de enero de 2020 y coincide con la conmemoración de los 800 años del legado franciscano en el país alauí, concretamente con el martirio de los frailes que tuvo lugar en 1220 en Marrakech. Los actos se desarrollarán en los tres templos jubilares de Marruecos: iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Tánger; San Francisco de Asís en Rabat y Santos Mártires en Marrakech. Durante todo el año se llevarán a cabo distintas actividades como la exposición de los archivos franciscanos o la reunión de distintas congregaciones de esta orden. Este Año Jubilar es una forma de “estimular el carisma de los franciscanos y la proyección para lanzar nuestra fe”.
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