Agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil han interceptado a una veintena de marroquíes cuando se disponían a embarcar en Santa Catalina con destino a la península. Los componentes de la Unidad abortaron la escapada, una acción que se está convirtiendo en rutinaria y que precisamente encuentra en este punto de la ciudad uno de los más usados por los inmigrantes para intentar escapar. De hecho el Instituto Armado sospecha de una organización previa en las salidas desde este lugar.
Los agentes localizaron a algunos de los sin papeles todavía en tierra y a otros a punto de partir en la embarcación. Los rastreos de la Unidad dieron como resultado el veto de esta salida así como la interceptación de todos los magrebíes.
En la base del Servicio Marítimo unidades de la Cruz Roja se han encargado del reconocimiento de todos, antes de su traslado a las dependencias de la Jefatura Superior para su posterior entrega a Marruecos. Este servicio se suma a los acontecidos en la noche del domingo, especialmente movida en los intentos de fuga de marroquíes. La Benemérita ha conseguido detener al patrón de la embarcación, que también es de nacionalidad marroquí.
En Calamocarro se impidió la salida de 20 argelinos y menores marroquíes y ya en el mar se detuvo a un español cuando intentaba colar en la península a dos magrebíes a bordo de una moto de agua. En los últimos meses las huidas de los súbditos del vecino país se han incrementado notablemente, tanto desde las costas españolas como de las marroquíes. La revolución social en Marruecos no ha hecho más que esperar.
De revolución social nada, está gentes huyen temiendo que los cojan para hacer el SERVICIO MILITAR.