La puerta principal de la Santa Iglesia Catedral se llenó de ladridos de los que fueron algunos de los protagonistas de esta jornada en honor al Patrón de Ceuta. Cerca de una veintena de animales, todos perros, esperaban la bendición de San Daniel, una tradición que para muchos ya es una cita obligada para algunos y una primera vez en el caso de otros.
Algunos se mostraron relajados y esperaron pacientemente junto a sus dueños, bien en sus brazos o sentados expectantes mientras miraban a su alrededor como iban llegando otros canes. En esta ocasión, son las únicas mascotas que esperan la bendición, al contrario que otros años en que gatos, pájaros, o incluso algún reptil, han acudido a la Catedral para recibir el agua bendita.
Hay quien se muestra algo más inquietos, ladrando mientras el ensordecedor sonido de las campanas no logra acallar sus quejas. Pero hay también quien aprovecha para hacer amistades y buscan al compañero más cercano con quien confraternizar.
El santo se recoge en la Catedral y es el momento de la bendición de manos del director espiritual de la Cofradía de San Daniel, Francisco Jesús Fernández Alcedo. Todos piden la protección del santo para sus animales: “Que nos duren muchos años y con buena salud”, explicó una de las asistentes. “Le pido a San Daniel que le de buena calidad de vida porque la adopté hace poco de la Protectora y es muy buena, se merece lo mejor”, apunta otra joven.
Agua bendita para todos y a gozar del favor del santo hasta el próximo año.