Agentes de la
Policía Local adscritos a la UIR han detenido a un joven en la barriada de Juan Carlos I en posesión de prácticamente un kilo de
hachís repartido en
bellotas. Tal y como explica la Jefatura de Ceuta, tenía la sustancia escondida en su coche, en un casco de moto, y marcada cada pieza con la cara de un mono y la leyenda Super Spuknik.
Una leyenda que recuerda, salvo por el error en una letra, a Albert, el primer mono en el espacio. Y es que cada pegatina con la que se señala el hachís tiene una interpretación difícil de entender.
La intervención se produjo en la noche de este lunes, en torno a las doce menos cuarto, cuando la UIR hacía un control en esta barriada y dieron el alto a un turismo marca Volkswagen Golf de color azul que presentaba la pegatina de la ITV caducada.
Con seguro pero sin ITV actualizada
Dicho vehículo pertenecía al llamado M.A.A que aunque sí tenía el seguro obligatorio en vigor no había pasado el trámite de la inspección técnica.
En la comprobación de la documentación el conductor, natural de Ceuta, se mostró nervioso y preocupado por lo que los agentes procedieron a realizar una breve
inspección ocular en el interior del vehículo. Allí, en la parte trasera y en el interior de un casco de motocicleta había un total de 19 bellotas color marrón, presuntamente hachís, envueltas en plástico y camufladas en una prenda de chándal con logotipo de un mono y la frase Super Spuknik.
Con 1.000 euros en billetes en su chaqueta
Tras estos hechos el conductor fue cacheado corporalmente, portando en uno de sus bolsillos un total de 1.000 euros repartidos en billetes de 50 euros y 420 dirhams marroquíes en el bolsillo de su chaqueta. Al existir indicios racionales suficientes para considerar que tales hechos podrían ser constitutivos de una infracción penal, se procedió a su detención siendo inmediatamente informado de los motivos de la misma, de sus derechos como detenido según la legislación vigente y trasladado a la Jefatura del CNP donde se pudo pesar con precisión lo incautado. En total son 980,94 gramos. Una vez entendió los motivos de su detención y los derechos que le asistían esta vez por escrito, se quedó en las dependencias policiales privado de su libertad y puesto a
disposición judicial por un delito contra la salud pública.