Vox-Ceuta ha enviado un comunicado para vincular la pérdida de población en Ceuta con un batiburrillo de causas, relacionándola con el intento por “desnaturalizar” la ciudad y hablando de “diáspora” y, de nuevo, de “marroquinización”. En un comunicado indica que la pérdida de población responde a lo que “algunos poderes políticos y fácticos andan buscando con ahínco”. Así lo ha señalado el presidente de la formación en Ceuta, Juan Sergio Redondo, ante la noticia de que la población de la ciudad se redujo en 730 personas durante el primer semestre de 2021, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística. Redondo ha asegurado que “el objetivo es desnaturalizar Ceuta y hacerla extraña para sus ciudadanos”, sin aclarar, como se suele acostumbrar en los comunicados de esta formación, a qué se refiere con “desnaturalizar”. Según los mismos datos del INE, “el saldo migratorio interautonómico muestra que, en la última década, se han ido 4.669 ciudadanos más de los que han podido llegar a la ciudad. Un dato que, en la práctica, supone que miles de ceutíes han emigrado a otras comunidades”, denuncia la formación.
A vueltas con la “marroquinización es islamización”
Redondo ha acusado a los
responsables políticos de “generar un ambiente irrespirable y desarrollar unas formas de vida totalmente ajenas a la de una sociedad española, europea y occidental”, sin especificar tampoco detalles que sustenten tales apreciaciones. “Esta diáspora es consecuencia directa del experimento de Vivas y del PP durante dos décadas”, asevera Redondo, quien lamenta que “el resultado inmediato es la inseguridad brutal que vivimos, el colapso económico y la
marroquinización e
islamización de la ciudad”. Vox vuelve a mezclar asuntos que vienen, de manera indirecta, a cuestionar la españolidad de la ciudad y a volver a colar dudas sobre las personas que viven en Ceuta sean de la religión que sean.