La oferta que figuraba en su página de Facebook era tentadora: “Súper Sorteo. Se acerca el buen tiempo y con la llegada de mayo os traigo este sorteazo gratis de un aumento de labios con ácido hialurónico. No te quedes sin participar”. Este tipo de suculentos mensajes son habituales en
anuncios fraudulentos y
estafas, que solo buscan que la gente pique. El modus operandi iba más allá. Y es que la malagueña, presuntamente autora de un delito contra la salud pública, además de ofrecer sus servicios de cómo médica estética con titulación de inyectología de ácido hialurónico, impartía cursos de estética en un garaje, “supuestamente reconocidos oficialmente”. La ceutí L.C.G. y su hija de 16 años G.G.G. son dos de las cerca de 50 afectadas que habría en toda la Costa del Sol.
“Aunque vivo en Estepona desde hace varios años y esto me ha pasado aquí, quiero que esto se sepa para que esto no siga pasando y esta persona no siga estafando porque lo ha hecho con gente de La Línea de la Concepción, Marbella y
Gibraltar, además de en Estepona”, denuncia la ceutí. Al parecer, la joven de 28 años se dedicaba a ofrecer cursos de estética. “Te llama y te dice que tiene un curso y tal. Da la casualidad que a mi niña de 16 años le gusta mucho este mundo de la estética y la apunté en septiembre del año pasado a uno de estos cursos”, rememora. Nada fuera de lo común, de momento. Sin embargo, en abril de este año esta madre pregunta a su hija y esta la confiesa que “no ha aprendido nada”. “Fue entonces cuando la busqué por Facebook. Mi hija va al curso durante 10 meses y no me podía creer que no hubiera aprendido nada. Hablo con la que era la profesora y me dice que a la niña le cuesta más trabajo que al resto, pero que no me preocupe que tiene que darme los títulos. Los diplomas la
Policía nos ha dicho que no sirven para nada y, por supuesto, no son oficiales”.
La ceutí siente que han jugado con la ilusión de su hija: “Lo peor de todo es que le ha quitado la ilusión a la niña. Ella no es formadora y no valen de nada los títulos. Son muchas más niñas las que se han visto afectadas porque hay un grupo de wasaps de por lo menos 50 afectados. Ella lo niega todo, pero tenía 4 o 5 tarjetas de teléfono y se hacía pasar por los profesores, e incluso por su abogado. A casi todas las afectadas nos ha llamado la Policía por una transferencia que le hizo una clienta a ella y de ahí empezaron a rascar porque llevaban tiempo investigándola”. Un supuesto fraude que va más allá porque esta mujer de 28 años habría cometido presuntamente un delito contra la salud pública ya que le inyectó ácido hialurónico a la menor. “Era el cumpleaños de mi niña y le regaló un aumento de labios inyectándole con agujas. Yo he pensado que ella tenía la certificación y le ha dejado los labios fatal. Por eso, hemos puesto una denuncia en la que constan los diplomas y la inyección. En total, nos habría estafado 900 euros, pero entre todos los afectados son cerca de 50.000 euros porque cada vez salen más casos. Una de las veces me dijo que me iba a devolver el dinero, que estaba con COVID y su padre me iba a dar el dinero y no lo localizaba. Y la vi con su padre en el coche. Todo era una constante mentira”. La investigación de las varias denuncias ha dado lugar al arresto domiciliario de la responsable de la clínica por un supuesto fraude y delito contra la salud pública. La afectada, dueña de la clínica, se ha puesto en contacto con este periódico negando este extremo.