Tras los hechos ocurridos este martes, cuando
tres soldados de Caballería sufrieron un síncope durante la realización de las pruebas de Unidad, la Delegación de la Asociación Unificada de
Militares Españoles (AUME) en Ceuta puso en conocimiento de su secretaría general lo ocurrido, con el fin de investigar qué es lo que ha podido pasar para que los soldados acabasen en el
Hospital Universitario de Ceuta. Y es que esta asociación profesional lleva tiempo investigando los riesgos a los que se someten los militares en esta prueba de Unidad. El delegado en Ceuta de AUME, José Vicente Maleno, detalla que los soldados la llevan a cabo con el uniforme de campaña, cargados con el armamento y con una mochila que pesa más de 20 kilos, entre otros enseres. Es una prueba en la que, además, se somete al soldado a un sobresfuerzo que debe llevar a cabo en un tiempo estimado de 90 a 100 minutos y reconoce que existen ciertos “piques” entre las distintas unidades que conforman la Comandancia General de Ceuta, como en otros lugares, por lograr ser la unidad que culmina la prueba en el mejor tiempo. “Se obligan ellos mismos a hacer un esfuerzo mayor”. Por ello, han anunciado que en el próximo pleno ordinario del Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas (COPERFAS) van a solicitar las incidencias que se hayan podido producir en el transcurso de esta prueba en otras comandancias de todo el país. Creen que es una prueba en la que los militares se exponen a un gran esfuerzo físico cuando, reconocen, no todo el mundo tiene la misma preparación. Y es que no todos los militares cuentan con la misma complexión física y tampoco están la totalidad de los soldados está destinada a labores operativas sobre el terreno, por lo que son estos efectivos los que se exponen a un riesgo mayor a la hora de completar esta prueba en equipo. En esta ocasión “sólo han sido tres sustos”, pero recuerda que hace dos años un capitán, también de Caballería, murió en el transcurso de este mismo ejercicio. Por lo tanto, con esta solicitud que se va a remitir al Ministerio de Defensa buscan averiguar si se han dado más casos similares en otras comandancias y, de ser así, plantarse una modificación de la prueba que no ponga en riesgo la integridad física de los soldados e, incluso, suprimirla si fuera necesario, siempre prevaleciendo la salud de los militares.