El tribunal de la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta ha condenado a cuatro personas implicadas en pases de inmigrantes utilizando para ello motos de agua. Que estén en el banquillo ha sido gracias a una investigación de la Guardia Civil que comenzó en 2020. Había 5 acusados pero uno no ha comparecido en el acto de juicio oral señalado este martes, dictándose orden de busca y captura.
Todos ellos han reconocido su responsabilidad en un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, asumiendo una pena de 2 años de prisión que queda suspendida por un periodo de 3. Entre todos asumen además el pago de las costas judiciales de manera solidaria y se ordena el decomiso de las embarcaciones: una moto y una semirrígida.
En agosto de 2020 el Juzgado de Instrucción número 6 dictó auto acordando la medida de investigación consistente en instalar un dispositivo electrónico de localización y seguimiento en una moto de agua modelo Yamaha Wave, al sospecharse de su empleo en el tráfico de personas.
Un auténtico negocio con reparto de papeles
Los acusados habían montado un negocio repartiéndose las funciones para cooperar y ejecutar estas prácticas delincuenciales. La Guardia Civil estaba detrás de sus pasos y así, en septiembre de 2020, pudieron detectar el movimiento de esa moto de agua, propiedad del acusado que se encuentra en busca y captura, cuando hacía la ruta desde Marruecos a la Almadraba.
Pilotada por otro de los acusados, transportaba a dos marroquíes indocumentados hasta España. Cuando el piloto detectó la presencia del Instituto Armado arrojó al mar a los inmigrantes poniendo en peligro sus vidas para intentar escapar.
Tras esa acción quiso subirse a una semirrígida de sus colegas de acción delictiva para abandonar el lugar. Allí le esperaban los demás acusados ahora condenados. Lo que hacían era controlar que el pase se llevara a cabo así como prestar apoyo al piloto de ser sorprendido en plena comisión del delito. Cuando el piloto subió a la embarcación otro de los acusados se subió a la moto para intentar despistar a los agentes.