El tribunal de la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta condenó ayer al piloto de una embarcación que fue detenido en septiembre del pasado año en plena comisión de un pase de inmigrantes. El acusado aceptó la pena de 2 años de prisión -casi lleva uno preventivo- por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y 6 meses más por otro de hurto de uso de una embarcación ajena. La figura jurídica de la conformidad sirvió para un reconocimiento de los hechos y el acuerdo de una pena que fue ratificada por el tribunal del máximo órgano judicial en la ciudad.
Los hechos a los que hace referencia este fallo se produjeron un 24 de septiembre de hace justo un año, cuando componentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil sorprendieron al piloto, vecino de Ceuta, a bordo de una recreativa a unas 7 millas al norte de Punta Almina. Ocultaba en el compartimento de proa, a puerta cerrada, a tres personas a las que pretendía introducir de manera ilegal en la Península. Lo hizo en una jornada en la que la misma Benemérita había abortado otro pase, este perpetrado por un marroquí y de 18 personas.
Los tres magrebíes que se ocultaban en la embarcación no llevaban chalecos salvavidas y formaban parte de un intento de escapada hacia las costas peninsulares. El ya condenado se había apoderado de la recreativa que estaba varada en el puerto deportivo, en las instalaciones gestionadas por Marina Hércules y cuyo dueño denunció su sustracción que se había producido poco antes del pase. Aunque fueron citados a declarar componentes de la Guardia Civil que intervinieron en este suceso, no fue necesaria su entrada en sala al haber ese acercamiento de posturas previo entre quien defendía los intereses del acusado y la representante del Ministerio Público.