La Consejería de Asuntos Sociales tiene muy claro que para los próximos presupuestos del año 2021 no quedará más remedio que incrementar las partidas destinadas a ayudas a grupos familiares que se encuentran en riesgo de exclusión social.
Las actuaciones efectuadas durante estos primeros meses de influencia económica de la pandemia del COVID-19, donde se incrementaron en más de un 35% el número de usuarios que son atendidos por el departamento autonómico en relación con las familias que recibían acciones directas de la propia Consejería, les hace prepararse para lo que se les viene encima en poco tiempo.
Debe tenerse en cuenta que el mismo presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas, ya anunció en varias ocasiones que los próximos meses e incluso el próximo año serán muy difíciles por las propias consecuencias económicas que traerán los meses de cierre derivado por el confinamiento. Y todo ello, sin que se produzca ningún rebrote durante el otoño que nos llevaría a complicar aún más la actual situación.
Previsiones
Las previsiones que maneja la Consejería de Asuntos Sociales pasan, en primer lugar, por preparar sus necesidades de cara hasta finales de año.
Es lógico que sus presupuestos se incrementen en el expediente de modificación de crédito que prepara el Gobierno de Vivas para adecuar las cuentas públicas de este año a las actuales necesidades.
En este apartado concreto, el sobrante de lo presupuesto para el Ingreso Mínimo de Inserción Social que al final no se utilizará porque las 83 familias que lo percibían serán asumidas por el Ingreso Mínimo Vital se podrá dedicar al incremento de las partidas. Recordemos que en los presupuestos de este año se habían previsto 700.000 euros, de los cuales 200.000 estaban congelados hasta que no se recibieran los fondos de los convenios de la producción de agua y de las acciones relacionadas con el hecho fronterizo.
Recordemos que ya se dijo que es una obligación la adecuación porque cuando se aprobaron los presupuestos ni se había producido la situación del COVID ni las consecuencias de la crisis económica proveniente de la decisión de Marruecos de suspender el comercio atípico.
Y de cara a las cuentas públicas del año 2021 la idea que mantienen es reforzar los convenios con todas las entidades con las que colabora la Consejería de Asuntos Sociales y que vean sus necesidades no cubiertas con los actuales montantes de los acuerdos que se están renovando ahora mismo.
Un número de usuarios mucho mayor que en la anterior crisis del año 2008
El número de usuarios se incrementó. Muchas personas que pensaban que no iban a necesitar nunca acudir a los Servicios Sociales se han encontrado ahora entre la espada y la pared. Y es que el golpeo de esta crisis económica provocada con el COVID-19 supone una verdadera revolución, de mucho mayor impacto que la anterior del año 2008 que vino en relación con el ladrillo. Ahora deberá observarse si el impacto es mucho menor o al final un posible rebrote lo agrava.