El diputado de Caballas, Juan Luis Aróstegui, exaltaba el presupuesto alternativo del grupo de la oposición como la “solución” a los problemas de Ceuta y la forma de “pensar de ayer del PP” anclada “hace diez años”. “Es un documento fosilizado que sólo sufre matizaciones”. Según Aróstegui la eficiencia en el gasto debe ser la “prioridad absoluta”, ya que un euro “malgastado es un acto de suprema irregularidad con el alto paro que sufre la juventud”.
El grupo de la oposición es capaz, apunta, de encontrar “hasta 30 millones tirados a la papelera”. Los sueldos de los políticos “son un escándalo”, mientras que no es lógico que en una ciudad como Ceuta decenas de “asesores, viceconsejeros, subdirectores salgan de la burbuja”.
Un segundo vicio, apunta, son los “contratos a diestro y siniestro”, en cuanto “todo es objeto de contrato con la firma amiga al lado”.
Aróstegui también ha criticado lo que la Ciudad ha fomentado y que él ha tildado de la “cultura de la subvención”, dado que el Ejecutivo promueve que “para cualquier cosa que se haga se pida una subvención ¿eso obedece al interés general?”.
Otro tipo de gastos que el diputado de la oposición ha puesto sobre la mesa ha sido el relativo al “quiero y no puedo” o el “querer aparentar, de eso sí peca mucho este Gobierno”.
Reorientar el gasto es “posible” y el presupuesto alternativo propone una cantidad que posibilitaria la “lucha contra el paro juvenil como prioridad y que generaría una demanda importante y una mejoría general”.
Otra prioridad del presupuesto, según expuso Aróstegui, sería la necesidad del cambio de modelo de prestación de servicios sociales, “hay que otorgar más derechos y no lo que el Gobierno ofrece cuando convierte a las personas en esclavos de caridad haciendo cola para pedir ayudas”.
No quiso Aróstegui abandonar el estrado sin dejar de abordar el tema del Príncipe y recordar que es un tema en el que “hay que cambiar de mentalidad o seguiremos cultivando la segregación y el germen de la destrucción de la ciudad”.
En cuanto a la vivienda, abogó por recuperar la iniciativa pública y dejar atrás la concesión de suelo a las empresas públicas, mientras que en el tema del desarrollo económico recordó que si bien el endeudamiento es algo positivo “hay que saber aplicarlo”.