La autoridad judicial ordenó este jueves el ingreso en prisión preventiva de un
joven detenido por agentes de la Policía Nacional que se habían desplazado a la
barriada del Príncipe, en Ceuta, para preparar el dispositivo de registro que se practicó en una vivienda ubicada en el antiguo Poblado Legionario. Los agentes sorprendieron al joven entrando y saliendo de un habitáculo de manera continua durante la noche, procediendo a su detención al mostrar una actitud sospechosa. En el momento en que se procedía a la práctica del arresto, les empujó para intentar su escapada sin éxito incurriendo en la comisión de un delito de atentado.
Tras el registro de dicho local, los agentes adscritos a la
UDyCO que están llevando la investigación enmarcada en la bautizada como Operación Plomo hallaron drones, armas y
droga. Unos datos de los que no ha informado oficialmente la Jefatura Superior. Es la segunda intervención de estas características que se produce en el mismo lugar y que se salda con decomiso de este tipo de material. Es el mismo lugar en el que, además, se han llevado a cabo meses atrás otros registros por parte de las fuerzas de seguridad.
Esta intervención se llevaba a cabo este miércoles, horas después de los disparos que se sucedieron en las antiguas caracolas y que dejaron a una persona herida en las piernas y el glúteo. Los agentes montaron un dispositivo en la barriada que culminaría con la entrada y registro en el antiguo Poblado Legionario y el arresto de una sola persona a la que habían visto entrar y salir continuamente de sus inmediaciones.
La Policía relaciona todos estos hechos con las investigaciones desarrolladas tras la escalada de violencia ocurrida en Ceuta, traducida en tiroteos constantes, presentación de denuncias y cuantiosas víctimas. Todos los casos se están siguiendo en los mismos procedimientos judiciales, aunque las detenciones o decomisos se produzcan en momentos diferentes. La Policía relaciona todo entre sí y vincula siempre los pasos con los mismos orígenes.
De las últimas detenciones llevadas a cabo se han producido entradas en prisión preventiva de algunos jóvenes acusados de participar en disparos y organización criminal, mientras que otros han quedado libres porque no se han mantenido denuncias contra ellos o se carece de pruebas suficientes como para vincularlos con estas prácticas delincuenciales.