A poco menos de una semana para que acaben las restricciones sanitarias a la movilidad nocturna continúan los incendios tras el toque de queda en Ceuta. A las dos de la madrugada acudían los bomberos a sofocar las llamas que emanaban de dos depósitos de basura en en la cuesta de Caballería. Afortunadamente, tan solo necesitaron un cuarto de hora para controlar el fuego que se había iniciado en estos dos contenedores y, tras recurrir a una cantidad de 500 litros de agua, pudieron regresar de vuelta al parque del SEIS (Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento).
A esta salida acudió una dotación formada por cinco bomberos y un vehículo, pues el incendio no fue de gran magnitud. Sin embargo, en otras de las actuaciones del Cuerpo como por ejemplo la de ayer en Arcos Quebrados, donde las llamas sí que llegaron a extenderse más, fueron necesarios hasta tres coches y unos 7.000 litros de agua. Los incendios en horario nocturno, pese a las limitaciones que dictan las autoridades sanitarias, son bastante frecuentes en Ceuta aunque no siempre presentan las mismas características. Contenedores (como en esta ocasión), vehículos, basuras o chatarra comienzan a arden durante la noche, y a veces incluso a plena luz del sol, muchas veces como consecuencia del vandalismo.
Han pasado más de dos meses desde que se celebraba la Junta de Seguridad Ciudadana, el día 3 de marzo, para abordar el asunto de los incendios que se originan habitualmente en Ceuta. Sin embargo, es difícil contener las acciones que llevan a provocar estos fuegos.
Las barriadas del Príncipe y el vertedero de Arcos Quebrados son algunos de los principales focos de incendios. En la primera de estas zonas llegaron a producirse una gran cantidad de incendios consecutivos en los días previos a celebrarse la Junta de Seguridad.