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En el auto al que ha tenido acceso El Faro se recalca que no aparece “debidamente justificada la perpetración del delito”
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No se da credibilidad a la versión acusatoria contra los dos investigados
El juzgado de instrucción número 2 ha dictaminado el archivo de la causa abierta tras la denuncia presentada por una joven que manifestó haber sido víctima de una violación en la carretera del Monte Hacho. Los hechos, ocurridos en abril, motivaron la detención de dos personas quienes ya, tras su puesta a disposición judicial, quedaron en libertad con cargos.
Ahora el juzgado decreta el sobreseimiento provisional procediéndose al archivo de las actuaciones al considerar que, “de lo actuado, no aparece debidamente justificada la perpetración del delito”, se expone en el auto a cuyo contenido íntegro ha tenido acceso El Faro. Dicha aseveración se sustenta en que la denunciante “no ha narrado siempre la misma versión” y en que “en sede judicial puso de manifiesto una serie de contradicciones que restan del todo punto verosimilitud a su declaración”, añade la magistrada titular.
De igual forma se ha tenido en cuenta el contenido del informe efectuado por el médico forense a la denunciante, quien fue examinada en el Hospital tanto física como ginecológicamente, sin que “se apreciaran lesiones genitales ni para genitales” que vinieran a corroborar la existencia de una agresión sexual como la que se había puesto de manifiesto.
Ambos fundamentos de derecho han motivado el auto de archivo, cerrándose de esta forma por la vía judicial uno de los casos que mayor impacto mediático y social produjeron. El procedimiento judicial se incoó en virtud del atestado policial presentado en el que se deba cuenta de una agresión sexual sufrida por la denunciante en la carretera de los Pinos, en el Hacho. La propia fémina culpaba a dos jóvenes a los que identificó plenamente de lo ocurrido, procediéndose a la detención de ambos poco después.
Ya el pasado 25 de abril, el Ministerio Fiscal había emitido un informe solicitando el sobreseimiento provisional de la causa, al que se adhirió la representación de los dos investigados, ejercida por el letrado Jorge Martín Amaya. La Acusación Particular no presentó escrito alguno respecto de lo interesado por la Fiscalía.
Ahora se conoce ya, mediante el auto firmado por la magistrada Laura de Lorenzo, el archivo y, por tanto, la retirada de las medidas cautelares que fueron impuestas a los dos detenidos.
En la declaración ofrecida por los dos investigados en sede judicial mantuvieron que la relación que se había tenido con la víctima había sido consentida y que solo había participado uno de los dos varones. Fruto de los exámenes médicos efectuados se pudo confirmar la inexistencia de lesiones por lo que el relato de hechos inicial no cuadraba con lo que se pudo verificar después en el Hospital.
Los hechos causaron una gran alarma social en una ciudad que no está acostumbrada a despertarse con denuncias de violaciones y agresiones sexuales de este tipo. Las horas posteriores a este caso llevaron a un intenso trabajo policial para localizar a los dos jóvenes que habían sido señalados como implicados. En el caso de uno de ellos se esperó a su regreso a prisión, en donde estaba cumpliendo condena por otros hechos, habiendo ocurrido este episodio mientras disfrutaba de un permiso de fin de semana. Desde distintas asociaciones se reclamó un rápido esclarecimiento de los hechos pero es ahora cuando se produce la respuesta judicial al trabajo previo que desarrollaron los componentes del Cuerpo Nacional de Policía.