El Gobierno de Ceuta ha dado luz verde a la redacción del proyecto correspondiente a la segunda fase de ampliación del cementerio
musulmán, que contará con una financiación de 15.000 euros. Se continúa así con el proyecto para ampliar el espacio, después de los momentos críticos registrados en
Sidi Embarek al no haber terreno para más enterramientos. En mayo de este año comenzaron las obras de la ampliación en su primera fase, después de años de espera para que se sacara adelante este proyecto. Con la obra se quiere conseguir 500 tumbas más, por lo que se ha tenido que ampliar terreno allanando el existente y procediendo a la demolición de viviendas que impedían ese avance. La primera fase ha sido desarrollada por la empresa Estructuras del Estrecho con un gasto presupuestado de 750.000 euros. Comenzaron con mucho retraso, tras aprobaciones de ampliación en sesión plenaria que no se materializaban, llegando a existir un temor fundamentado por la falta espacio que impedía poder seguir haciendo entierros. Los trabajos se han centrado de momento en allanar el camino con el que se ganará esta ampliación que se está llevando a cabo en la parte baja del cementerio, después del desbroce y limpieza de toda la zona y la toma de datos topográficos para actuar sobre el terreno sin riesgos. De manera simultánea, se han ido haciendo los muros de contención que servirán de sostén a las plataformas y caminos de acceso, así como los de cerramiento perimetral. Se han colocado luminarias por la parte ya ampliada que debe continuar con esta segunda fase. La comunidad musulmana ha reclamado durante muchos años que se procediera a la ampliación del cementerio sin que viera cómo se atendía una petición urgente. Finalmente se dio el paso y ya, además de la ampliación, se ha acordado la construcción de un tanatorio.