La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA), junto a más de un centenar de organizaciones, ha presentado el documento 'Medidas para un trato digno a las personas muertas y desaparecidas en los trayectos migratorios y a sus familiares', con motivo de la conmemoración este miércoles del 34º aniversario de la llegada del primer cadáver de un inmigrante en España el 1 de noviembre de 1988. Muchos son los inmigrantes cuyos cuerpos sin vida aparecen también en aguas de Ceuta.
Desde ese momento, la organización ha documentado la muerte o desaparición de más de 12.000 personas. Por ello, este documento, que será enviado al Defensor del Pueblo, al Gobierno de España y a los responsables de los grupos parlamentarios, es un paso más en la campaña #VidasSinRastro, que se viene desarrollando desde el pasado mes de mayo, momento en que las entidades enviaron al Defensor del Pueblo y al Gobierno un decálogo de exigencias.
"Es tal la odisea, el vacío legal y administrativo con el que se encuentran las familias y tan grande el sufrimiento y la impotencia que esta inexistencia de mecanismos provoca, que hemos preparado un programa específico con las medidas necesarias para un trato digno a las personas muertas y desaparecidas y sus familiares en la frontera sur", explica la asociación.
Entre las medidas presentadas destaca la creación de una Oficina Única de Información para Familiares. "Se trata de una oficina que se enmarcaría orgánicamente dentro de la estructura del Defensor del Pueblo y que debe asegurar una atención integral en el acompañamiento y apoyo a las familias tanto en la denuncia, búsqueda y localización de sus seres queridos, como en los procesos de identificación de personas fallecidas", señalan.
Proponen un banco de ADN conectado con la Interpol
"Uno de los principales problemas que hemos venido detectando", apunta la organización, "es la ausencia de mecanismos de acceso para quienes buscan a personas que han iniciado el trayecto migratorio hacia España". "La barrera idiomática, las dificultades burocráticas y la multiplicidad de instancias hacen prácticamente imposible esa búsqueda", han continuado denunciando.
Por ello, proponen la creación de esta oficina única a la que los familiares podrían acceder a través de una web, por teléfono o por correo electrónico y que vendría acompañada de unas Unidades de Gestión ubicadas en las principales zonas de llegada de inmigrantes. Estas unidades de gestión recopilarían la información en las zonas de llegada para transmitirla a la oficina única.
No es esta la única medida prevista por este centenar de organizaciones. También proponen crear un banco de ADN, en conexión con el sistema I-Familia recientemente creado por Interpol, mejorar los convenios de repatriación o establecer un nuevo marco jurídico para las declaraciones de ausencia o fallecimiento en relación con las personas inmigrantes.
"A pesar del número creciente de fallecimientos en la frontera sur, desde las autoridades estatales nada se ha hecho por proporcionar un trato adecuado, integral y digno a estas personas y a sus familias", indican los responsables de la organización.
Este programa de medidas es "absolutamente necesario" para cambiar la realidad que vienen sufriendo las personas inmigrantes y sus familiares "desde hace más de tres décadas", concluyen.