Corren malos tiempos para la sanidad pública en Ceuta. La corriente crítica con los médicos en huelga pone en entredicho el compromiso con el juramento hipocrático, pero el episodio vivido este sábado en las Murallas Reales contradice, al menos en este caso, el desapego entre parte de la ciudadanía y los profesionales sanitarios movilizados.
La coordinación entre un trabajador de Amgevicesa, unos civiles y el Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) ha posibilitado que la dolencia que aquejaba a un octogenario con muletas no acabase en tragedia. Esta colaboración desinteresada ha facilitado, posiblemente, salvar la vida de un hombre que hasta ahora conocían de vista, de cruzarse caminando por la calle, y que a partir de ahora unirá esta experiencia.
Un ceutí caminaba con su hija y su nieta por las inmediaciones de las Murallas Reales cuando un empleado de Amgevicesa les solicitó ayuda: un señor se encontraba indispuesto en el acceso de la avenida González Tablas.
Como relató a la familia de paseo este sábado, fue capaz de interceptarlo antes de que cayese al suelo. Ahora trataba de contactar con el servicio de emergencias del 061 pero no había ambulancias disponbiles y les pedía consejo. Por suerte, la ceutí presente es auxiliar de enfermería y pudo ocuparse de la persona que se encontraba mareada y presentaba signos de tener la tensión baja.
Agradecimientos por esta cadena solidaria
Mientras tanto, el civil trató de contactar telefónicamente con los servicios sanitarios hasta, finalmente, establecer contacto con el equipo del SUAP, que envió su vehículo con un médico y un profesional de enfermería.
Ya in situ, los sanitarios pudieron estabilizar el paciente y proceder a su traslado.
Los civiles que activaron esta cadena solidaria que ha permitido evitar una tragedia quieren agradecer al empleado de Amgevicesa y a los trabajadores del SUAP su predisposición a la hora de ayudar al octogenario.