Hubo muchas críticas en su día por la decisión realizada por la Fundación Amancio Ortega de donar varios cientos de millones de euros a las distintas autonomía españolas, incluidas las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla para la compra de material que sirva para la detección de las enfermedades oncológicas.
En el caso de nuestra ciudad la aportación es de un millón seiscientos mil euros, pero se está negociando con la Fundación para ver si hay alguna manera de incrementar este dinero, ya que se va cambiar absolutamente todo el material del servicio de radiología. Se va a adquirir un nuevo TAC y Resonancia Magnética Nuclear, además de aparataje convencional de Radiología, varios ecógrafos y una unidad destinada al servicio de Urología.
Ayer fue la presentación del primero de estos aparatos, específico de radiología portátil, con un coste superior a los cien mil euros y que servirá para que los enfermos graves que estén hospitalizados en la UCI o en otros departamentos del hospital no tengan que ser trasladados hasta rayos.
En definitiva, Ceuta en este caso no ha sido distinta al resto de las autonomías españolas y este nuevo aparato de radiología portátil nos hace estar en la misma línea de hospitales de mayor importancia que el nuestro. En algo, desde luego, debemos ser como los demás españoles.