El eslogan sobre la interculturalidad de Ceuta queda en entredicho con la iluminación extraordinaria de Ramadán.
Eso es lo que piensan vecinos de barriadas como San José-Hadú o Vicedo Martínez al ser preguntados por el alumbrado ornamental, quienes critican respectivamente la ausencia e insuficiencia de luces.
Pues así será hasta el futuro 2023, tal y como figura en el pliego de condiciones técnicas que regula la contratación de una empresa para el alquiler, montaje, desmontaje, mantenimiento y almacenaje del material.
No obstante, el contrato de 2018 y el que comprende el periodo de festividades que va de la Feria de este año al Ramadán de 2022 contempla la posibilidad de que los licitadores ofertasen mejoras.
Algo que distintas barriadas dudan a tenor de los resultados de la instalación de este año, cuya competencia recae en la Consejería de Medio Ambiente y Sostenibilidad.
Quizá el caso más flagrante, por conocido, sea el de Vicedo Martínez. Los residentes explicaron que la propia Asociación de Vecinos tuvo que instar a la retirada de unas guirnaldas con lámparas de rosca y exigir el cambio por iluminación LED.
“Hemos visto en otras partes de la ciudad cómo ha evolucionado este sector, pues tan solo hemos querido sumarnos a ese progreso”, explicaron.
En sustitución de las “bombillas de los años 60” que mostraron en fotografías, la empresa colocó unos “arquitos LED”, a juicio del vecindario, peores que los de años anteriores y que invitaron a la Ciudad a ponerlos en la Gran Vía.
“Somos partidarios de que, para que nos tomen el pelo, que no pongan alumbrado de Ramadán”, confesó un miembro del vecindario cansado del “abismo” entre las ‘dos ceutas’: una la dotada, engalanada y presupuestada; y, la otra, a la que quieren arrebatar la supuesta poca categoría que tiene.
Otros relativizaron la importancia de la queja porque en Ramadán “todo está alumbrado por la gracia de Allah”.
Al salir a la avenida Teniente Coronel Gautier, no se ve ni una luz por el mes sagrado. Pero, ni en esta arteria comercial donde los residentes dicen que podría activar el consumo como ocurre en Navidad, ni en las calles interiores.
Allí solicitaron, con Salvador Jaramillo en Festejos, alumbrado extraordinario en Marqués de Lede y Blond Mesa. Desde entonces llevan esperando y ya suman varios años que, por los anexos del contrato de la Consejería de Fernando Ramos, todo hace pensar que se van a prolongar.
La Asociación de Vecinos Príncipe Felipe ya dio a conocer su malestar esta semana. Otras, como la de Loma Colmenar, ha tirado por la calle de en medio gracias a que han prestado a la barriada cuatro o cinco guirnaldas que dan cierto ambiente festivo a sus calles.