Muy buenos días!!!
Cómo se nota que hemos vuelto totalmente a la normalidad!!! Si, si…, la vuelta al cole, comprar los libros, uniformes del colegio, vuelta al trabajo, a los madrugones…, y si!!! también nos dice que hemos vuelto a la realidad uno de los mayores enemigos de las mujeres: la Liga profesional de Fútbol!!! Fin de semana tras fin de semana, este fenómeno social difumina (aún más si cabe) las neuronas del “homo domesticus” y se deleita con las acciones de los gladiadores del siglo XXI.
Bueno, no hace falta que haya fútbol…, también vale Fernando Alonso en su Ferrari Fórmula 1, Rafa Nadal remontando un partido de tenis o Pau Gasol encestando un triple…
Deporte, deporte y más deporte. Seguimos sus batallas deportivas, celebramos la genialidad de un Messi, el liderazgo de un Casillas, la dedicación de un Cristiano Ronaldo, el triunfo de una selección con un mismo objetivo, la disciplina, la concentración…
Y ahí quedan esas gestas heroicas de los fines de semana, como si fuesen cosas extraordinarias lejanas y al alcance de muy pocos.
Pero… ¿Acaso no es un deporte de riesgo extremo yendo en coche el intentar dejar a nuestro hijo lo más cerca de la puerta del colegio un día de lluvia? ¿Acaso no es un esfuerzo maratoniano ir a comprar tras una jornada laboral y subir 10 bolsas de la compra a tu casa? ¿Acaso no es una lucha olímpica el aguantar al jefe todos los días? ¿Acaso no es una prueba de velocidad recoger al niño de kárate, llevarlo a ballet, recogerlo en pintura y dejarlo en inglés? ¿Acaso no es necesario tener el temple y serenidad de un tirador de arco para aguantar la burocracia administrativa con sus miles de papeleos y tiempos muertos?
¿Sabéis una cosa…? Creo que no hay nada que envidiar a esas gestas deportivas de los fines de semana porque nosotros, en nuestro día a día, en nuestro trabajo, casa y familia… somos deportistas de “Alto Rendimiento”!!!.
Así es que empecemos a sacar pecho y a levantar la cabeza y a mirar de tú a tú a nuestros héroes deportivos…, a observarles, como compañeros de alto rendimiento que somos, que cosillas, trucos, actitudes “podríamos copiarles” para mejorar “nuestro juego”.
¿Qué podemos aplicar del deporte de alto rendimiento en nuestra vida común? ¿Cómo podríamos conseguir esa excelencia deportiva en nuestra cotidianeidad?
Podemos empezar por la CONCENTRACIÓN. ¿Sabemos qué nos traemos entre manos? ¿Sabemos exactamente lo que queremos conseguir? ¿Nos distraemos con los pajaritos, contando nubes… o vamos directo al grano? ¿Qué tal gestionamos nuestras fuerzas y energías?
DISCIPLINA!!! Uuyyy, esta palabra le duele a los perezosos y holgazanes nada más leerla!!! Y quizás sea porque la asocian con algún rollo de película de guerra. No señores perezosos y holgazanes, no!!! Disciplina es ponerte a hacer aquello que sabes que tienes que hacer…, cuando lo tienes que hacer!!! (Nota: lo anterior no es un gracioso trabalenguas!!!)
Planifícate, autoentrénate!!! Eso mismo…, se tu propio entrenador!!! Dirige tus recursos, tus energías, tus ilusiones, tu tiempo…. Exígete un paso más, exígete más tiempo, exígete más dedicación…exígete más de ti mismo!!!
Práctica, esfuerzo,… dar el 100 % en el proceso!!! Disfrutar del proceso, de cada momento, de cada paso!!! No tengamos la mente tan sólo en el resultado final…, disfrutemos como lo hacen los profesionales del deporte de cada bola, de cada pase, de cada curva, de cada zancada…
El resultado no es lo más importante, ni es lo único. El resultado es la consecuencia del disfrute del proceso, de vivir y andar el camino con energía e ilusión…, es la consecuencia de tus actos y actitudes, de poner tu propio sello personal en todo aquello que hagas!!!
A veces… vienen las “lesiones”!!! Esas etapas en las que sabemos que no estamos al 100%, que no tenemos ni las ganas ni las energías para seguir “jugando”, esa mala racha en las que “no nos encontramos con el gol” como dirían futbolísticamente hablando…
Pasa a los mejores jugadores… ¿Por qué no iba a pasarnos a nosotros? Que ocurra no es nada malo, sino todo lo contrario… nos dice que estamos en el juego… y que hay que volver a él con más fuerza si cabe!!!
Los deportistas profesionales trabajan en estas etapas con la CONSTANCIA y el ESFUERZO. Saben que ese tiempo estancado es tan sólo una situación pasajera,… hacen inventario de sus objetivos, fuerzas, propósitos… y luchan, luchan, luchan hasta volver a ver el sol, hasta ver que están de nuevo donde desean y como desean estar!!!
¿Por qué no introducir estos conceptos en nuestra vida y pasar de una “vida normal” a una “vida de alto rendimiento”?
¿Y el banquillo…? ¿Qué sería el banquillo en nuestra vida diaria? Respuesta: lo que tú quieras que sea!!!
Puede ser el equipo suplente que está ahí para cuando la cosa no salga como se tiene planeada, eres el plan B!!! Eres parte fundamental del equipo.
El banquillo puede ser también el lugar desde donde se ve el espectáculo, un lugar para reflexionar, para ser humilde y reconocer errores, para preguntarse por qué no estamos en el juego…, para ver que es aquello que nos falta para estar en el campo e ir a por ello…
Y por último… un concepto mal utilizado de banquillo podría ser un cuadrilátero de víctimas que con sus críticas, opiniones, negatividades y envidias… no hacen más que manifestar que se mueren por estar en el centro del campo con todas las luces apuntándole a ellas.
¿Y la VOLUNTAD? ¿Y la ILUSIÓN?... Advertencia!!!: “Las autoridades del crecimiento y desarrollo personal advierten que la mezcla de un objetivo definido con voluntad e ilusión puede desencadenar en un éxito seguro y unos resultados increíbles” (Avisados quedáis!!! )
Y para terminar…, y no por ello menos importante!!! Un VALOR que bien merecería dos o tres artículos más!!! El COMPROMISO!!!
En la abundancia, en el “colegueo”, en las victorias, de copas, de fiesta… todo es muy bonito y de color rosa!!! Pero… ¿Y cuando nos llega el cansancio, y cuando se hace cuesta arriba, y cuando nos pesa el alma, y cuando la cosa se pone gris…?
Un deportista de “alto rendimiento” comienza a poner su sello personal, comienza su trabajo cuando para todos los demás ha terminado…, va más allá del cansancio y el agotamiento!!!
Cuando la cosa se pone “chunga”… aparecen los jugadores con compromiso, aparecen las personas con compromiso y tiran del carro…
Es ese compromiso tatuado en su alma el que les hace luchar hasta el último segundo, el que les seca el sudor y le da una palmada en la espalda para seguir, el que le susurra al oído por qué y para qué está ahí…, el que le recuerda que está jugando el partido de su vida…
Nuestro compromiso tiene que ser más grande que nuestro estado de ánimo o tan sólo haríamos aquello que nuestros “días-buenos” nos permitiesen. ¿Cuál es tu grado de compromiso en la vida? ¿Cuál es tu grado de compromiso en tu juego?
¿Ves como no hay tantas diferencias entre los profesionales del deporte… y los profesionales de la vida?
Alto rendimiento es sacar el máximo partido de ti mismo, de tu identidad, de tu personalidad, de tus conocimientos, de tu ser…
Alto rendimiento es saber que estamos jugando cada día el partido de nuestra vida, no importa si es en un supercampo de césped o en un descampado con una portería hecha con dos piedras y un balón de trapo…
Importa que somos jugadores las 24 horas del día, que puede ser que llueva, que haga un calor de justicia o que no salga el sol en meses…, pero es el campeonato de nuestra vida el que está en juego!!!
Celébralo, disfrútalo, vívelo!!! La victoria es una existencia vivida… a tu manera!!!
Muchas gracias!!!
pedro.alarcon@live.com