Alcohólicos anónimos conmemora el 21 de abril sus 25 años de vida

Se lanzarán mensajes de aliento a los que padecen la enfermedad de la adicción

Con motivo de la efeméride que cumple el próximo 21 de abril el Grupo Renacer de Alcóholicos Anónimos, nada menos que 25 años de vida, los miembros de tal asociación han programado para ese día una reunión especial entre el personal que la componen y  en cuyas actividades programadas podrán participar todos los ceutíes que así lo deseen.
Se trata, como explica Antonio F., relaciones públicas de la asociación y ex bebedor, “de una reunión entre compañeros, pasar un rato juntos y contarnos los unos a los otros los avances y el enorme esfuerzo que hemos realizado por superar una enfermedad que te va a arrastrando no sólo perjudicándote a ti y a tu cuerpo sino también destrozando familias”.
La celebración, que se producirá el citado 21 de abril, se desarrollará en la nueva sede de Grupo Renacer Alcóholicos Anónimos, “situada ahora en el Morro porque la que teníamos hasta ahora, en la calle Teniente Arrabal, está situada en un inmueble que pronto va a ser demolido”, cuenta el hombre, relaciones públicas de la asociación, rehabilitado como otros de sus compañeros.
“Por ello”, prosigue Antonio F., “debemos estar agradecido por el apoyo y la ayuda del ayuntamiento, que nos ha ofrecido el nuevo local”. Aunque en un escenario distinto, la esencia de las reuniones que tienen todas aquellas personas que se atreven a dar el paso de hacer pública “la enfermedad del alcoholismo”, seguirá siendo la misma así como el objetivo: “Aquí vienen indistintamente hombres y mujeres, en un porcentaje de un 80 por ciento hombres y el resto mujeres, quizá porque la mujer tiene más miedo a que se sepa su adicción al alcohol, de ahí que tienda más a beber en casa  mientras que el hombre prefiere ir a bares, en cualquier caso todo el que viene aquí lo hace por su cuenta y aunque nosotros lo escuchamos, le podemos dar consejos o guiarlo, única y exclusivamente saldrán de la enfermedad si es por su propia fuerza de voluntad.
–¿Se puede superar la adicción a la bebida, es factible dejar de ser un alcohólico?
–Se puede, claro que sí, éste es el mensaje de optimismo que podemos lanzar y en mi caso lo hago con conocimiento de causa, después de que tocara fondo. Eso sí, me gustaría decir que aunque una persona lleve ya años sin tomar ni una gota de alcohol, jamás puede bajar la guardia y siempre tiene que tener fuerza de voluntad porque el peligro está ahí, siempre al acecho, como el riesgo de una recaída, que suele ser muy fuerte”.
Cuenta Antonio F. que precisamente realzar los ejemplos de personas que superaron el trance “es uno de los objetivos por el que nos queremos reunir nosotros el día 21, aunque sabemos que esto es una lucha diaria y por tal motivo siempre nos reunimos en la sede cada miércoles.
En este sentido, el relaciones públicas de Alcohólicos Anónimos asegura que “las puertas de la asociación está siempre abierta a todo aquel que quiera contar su caso y además ponemos a disposición otros medios de ayuda, como puede ser la tradicional vía del teléfono o ahora internet”, todos ellos soportes que tienen el mismo  fin: ayudar a un enfermo.

La historia de un ex alcohólico

“Toqué fondo y después de 18 años tuve que recuperar a mi familia”. Las palabras de Antonio F., relaciones públicas de Grupo Renacer de Alcóholicos Anónimos,  son las de una persona que, a base de mucho esfuerzo, pudo superar la enfermedad del alcoholismo, como tantas otras personas, ejemplares como él. Por eso anima a los alcohólicos a que luchen por dejar atrás la adicción y lo hace contando para ‘El Faro’ su caso: “Tuve la desgracia de probar el alcohol muy joven cuando me quedé huérfano con 16 años. Tenía que cuidar a un hermano y me creía más hombre por beber. Al principio era fuerte y dominaba el alcohol pero llegó el momento en que el alcohol me dominó a mí. Me casé y seguí igual, esto es una enfermadad progresiva y cada vez fue a más. Tuve dos hijas y también bebía pese a querer dejarlo. En 18 años una de mis hijas no me besó. Conocí Alcóholicos Anónimos en el 91 , desde entonces no tomo alcohol  y hoy  mi familia me apoya en todo y me quiere. Me encantan mis cinco nietos”.