Pocos asuntos de los tratados en la jornada de ayer durante el Pleno de la Asamblea quedaron fuera de la polémica política. El servicio del 112 no fue uno de ellos.
El consejero de Presidencia, Gobernación y Empleo, Jacob Hachuel, aseguró que el personal encargado de su funcionamiento está asistiendo a cursos de formación. Además, se mostró convencido de que necesita una transformación importante. Recordó que el Ejecutivo local estaba buscando un nuevo local para ubicar este servicio. Y afirmó que se va a proceder a la contratación de nuevos servicios de telecomunicaciones porque los actuales han quedado desfasados.
Caballas, en la misma línea pero desde la postura crítica que le corresponde como partido de la oposición, también exige mejoras en su funcionamiento.
Se trata de una petición lógica teniendo en cuenta la importancia de la labor que tienen encomendada los profesionales del 112. De hecho, el conjunto de la ciudadanía se mostraría de acuerdo en acometer los cambios necesarios y dotar a este servicio de los recursos imprescindibles para garantizar su perfecto funcionamiento.
Es un asunto que, al margen del debate político que pueda generar, debería ser considerado con la suficiente entidad como para que las distintas formaciones políticas en la Asamblea decidieran sacarlo de entre los asuntos que centran sus habituales enfrentamientos para, desde el Gobierno y la oposición, plantear propuestas constructivas. El 112 es un servicio cuyo buen funcionamiento es importantísimo para garantizar la seguridad en nuestra ciudad. Así debería ser entendido por todos los que tienen en su mano realizar cualquier tipo de aportación o propuesta que ayude a mejorarlo. Así debería ser por el bien de todos.