La afición. Esa hinchada que anima al equipo, los que nunca lo deja solo. Esa afición fiel, imprescindible para que un equipo consiga sus objetivos. Ese sentimiento lo tiene la AD Ceuta.
Si la afición cree, los jugadores creen. Es un binomio perfecto para que un club y una ciudad vayan de la mano y juntos alcancen grandes metas.
Elemento vital e indispensable para un club deportivo, históricamente siempre ha estado ahí, animando a los suyos en base a simpatías. Es el corazón blanquinegro del Ceuta.
FaroTV ha querido estar con algunos de los protagonistas que han hecho que el club haya crecido de manera considerable. Son ejemplo de la unión creada entre equipo y afición.
Uno de los culpables de que la historia del Ceuta esté creciendo es, sin duda, el técnico José Juan Romero. El ‘genio’ de Gerena ha conseguido convertirse en un ídolo del ‘Murube’ que cada domingo corea su nombre.
Romero, ya enamorado de la ciudad, destaca que el equipo siempre tiene que darle a una afición para que esta responda, pero que los fieles caballas han demostrado estar en las buenas y en las malas.
“Creo que el punto de inflexión no está en esta temporada, sino en la pasada cuando más lo necesitábamos que estábamos clasificatoriamente hundidos y ahí la afición decidió que el Ceuta no iba a descender. A partir de ahí, sí que es verdad que estamos viviendo una ‘locura’ o un momento maravilloso. Es el camino si los ciudadanos quieren que su primer equipo sea el de su ciudad, al margen de los equipos de élite”.
Una sensación de fidelidad con el club que le hacen sentir cada vez que camina por las calles ceutíes. “Lo que se percibe en la calle es que todos los ceutíes son del equipo”.
“Está claro la importancia de lograr cosas. El equipo asciende en dos años seguidos, el año pasado hace la machada que hizo y este año, pase lo que pase, ya es una extraordinaria temporada. Lo que se trata es de que cada vez vayamos poniendo los cimientos para tener una construcción fuerte, es la clave para que los equipos puedan aspirar a más”, detalla.
En esta segunda etapa como entrenador del Ceuta asegura que lo que se vive ahora es algo difícil de describir. Una unión que se ha ido forjando con el paso del tiempo y que ha hecho que el nombre del equipo caballa resuene con fuerza.
“Yo vine en Tercera y no tiene nada que ver respecto a lo que se vive ahora. Lo que ahora mismo se ve en la ciudad es lo mismo que se ve en ciudades donde cuentan con equipos en la élite. En Primera RFEF se está notando mucho el arraigo a su equipo, olvidando lo que es la élite, y aquí en Ceuta el domingo pasado iba por las calles y lo que veías era niños, mayores, abuelos con camisetas e indumentaria del Ceuta. Eso es una pasada”.
Romero lo tiene muy claro: la afición del Ceuta ha estado cuando tenía que estar. “Aunque me haga cansino, sigo diciendo lo mismo, lo importante no es lo que ya está generado. La diferencia que tiene la afición del Ceuta con la gran mayoría es que en los momentos malos fue cuando decidió estar más que nunca con su equipo”.
El entrenador andaluz ha vivido muchos momentos al frente del club, pero tiene claro que ninguno como el que vivió en el encuentro ante el Málaga. Fue el mejor día de su carrera.
“Fue un día que nos quedará a todos en el recuerdo. Aunque sabíamos que iba a ir mucha afición no esperábamos tanta. Cuando bajo y veo la que había liada (fuera del hotel) yo solo pensaba... Dios mío, que todo salga bien porque no merecían otra cosa. Fue el domingo más bonito en mi carrera como entrenador por muchos aspectos y fue un día que puede marcar la historia de este club”.
Uno de los jugadores con más años luciendo la elástica caballa es Ñito González. El centrocampista algecireño se ha convertido en una pieza fundamental tanto dentro como fuera del vestuario.
Desde su llegada a la entidad que preside Luhay Hamido mucho ha cambiado la cosa, tanto que se está hasta dos categorías por encima. “Creo que desde el año pasado se ha ido viendo cómo la afición se ha ido enganchando al equipo, diría que desde las eliminatorias de la Copa del Rey fue uno de los momentos claves porque estábamos pasando un momento muy duro. El equipo demostró a la afición que se podía conseguir la salvación y así fue. Fue algo histórico y ya se veía esa ilusión en la calle”.
El gaditano sueña con jugar el play off de ascenso a la Segunda División, una categoría ya profesional que cambiaría todos los estamentos del club.
“Este año desde el principio hemos notado ese calor de la afición, aún más si cabe cuando toda la ciudad, al igual que nosotros, soñamos con jugar unos play off de ascenso a la Segunda División”.
Ñito no sabe describir con palabras la evolución que ha tenido el club y, sobre todo, lo que se ha forjado con la afición. “Cuando llegué hace varias temporadas la afición estaba, pero según han ido pasando los años se ha forjado una unión equipo-afición-ciudad difícil de explicar. Es algo increíble”, detalla emocionado.
El centrocampista algecireño tiene claro que la afición caballa merecía vivir algo así porque siempre ha mostrado su mejor cara cuando las cosas no iban bien y también necesitaban saborear la gloria.
“Con todo lo que se sufrió el año pasado, la afición se merecía vivir algo tan bonito como lo que se vivió en el desplazamiento a Málaga o lo que se está viviendo cada domingo en nuestro estadio. Con todas las personas que había en ‘La Rosaleda’ se escuchaba a nuestra afición”, recuerda.
“Es verdad que al principio de temporada yo pedía un poco más de calor, notaba algo frío a la afición, pero según han ido pasando las jornadas es algo increíble. El ‘Murube’ cuando aprieta se ve en los resultados, solamente podemos agradecerle”, concreta.
Uno de los culpables de la unión entre la afición y el equipo es, sin duda, Jesús Alonso, más conocido como Dj Poyito. El speaker del club llega cada domingo al ‘Murube’ con su propio material que de manera desinteresada lo utiliza por amor a su equipo.
“Llevo unos 14 años, he viajado con el equipo cuando nadie iba y aquí seguimos al pie del cañón. Traigo mis propias cosas por amor al club e incluso le dejo el micrófono a Adri Suárez para que esté animando a la afición durante los 90 minutos”.
El speaker ceutí siente emoción cada vez que ve a la afición animar a su equipo o, como se suele decir, cuando ruge el ‘Murube’ para animar a los suyos. “Cuando veo el estadio lleno y a toda la afición con la bufanda hasta lloro. Es una cosa muy bonita de sentir ya que una hora antes se ve cómo los aficionados llegan al campo y es que me emociona vivir todo esto. Sobre todo porque he venido del ‘barro’ cuando aquí no venía nadie”.
Dj Poyito habla del cambio que ha dado la ciudad y cómo ahora los niños solo quieren la equipación del Ceuta. La pasión por el club de su tierra ha crecido de manera considerable y hace que el club esté escribiendo en el libro de la historia.
“Los niños por la calle con las camisetas del Ceuta te hacen ver que lo que se está viviendo es muy diferente. Ya es más difícil de que solo se hable de Madrid o Barcelona, ahora todo el mundo habla de que el Ceuta puede jugar los play off. Mucha gente me escribe diciéndome que a ver si le puedo conseguir un vídeo de un jugador, del entrenador… el ambiente es increíble”.
Pero cuando las cosas se hacen bien es por algo y así lo cree este animador del club caballa. El trabajo de todos ha hecho que se reme en la misma dirección y el Ceuta esté en el camino correcto.
“Se nota mucho que se están haciendo las cosas bien. La idea de llevar a los jugadores a los colegios, por ejemplo, es algo que hace que cree sentimiento de club. Además eso es ventajoso porque ahora el niño le pide al padre acudir el domingo al ‘Murube’ lo que provoca que siempre esté lleno”.
Los pequeños también necesitan ídolos y entre ellos está Jota López. El ser uno de los jugadores más jóvenes de la plantilla y habiendo subido del filial hace que sea un espejo en donde mirarse los pequeños. “Se crea un feeling distinto con los pequeños de la ciudad porque te ven como un referente. Para mí es un orgullo servirle de ejemplo a todos los jóvenes de Ceuta y que vean que con esfuerzo y trabajo es posible llegar al primer equipo”.
“Es una alegría poder ver que la gente te anima, ya no solo en el Murube, sino cuando vas paseando por la calle. Eso significa que en la ciudad se respira fútbol y es en base a lo que el grupo ha estado realizando y hemos hecho algo grande que la afición se merecía. Se ha creado un vínculo muy grande y es algo que se está transmitiendo a la hora de los resultados y los partidos”.
Jota, al igual que el resto de sus compañeros, piensa que todo lo que hace la afición es admirable y que lo único que pueden hacer es devolverle el cariño que le muestran.
“Es admirable lo que hace la afición para apoyarnos juguemos donde juguemos y solo podemos estar agradecidos y dar todo de nosotros para devolverle ese cariño”, finaliza.
Una de las cosas que mejor se está haciendo es intentar llegar a los más pequeños.
Un paso importante es la visita de los jugadores a los centros educativos de la ciudad.
Con eso se está consiguiendo que los pequeños puedan ver a los pupilos de José Juan Romero de cerca y querer ser de mayor como ellos.
Las camisetas, bufandas y sudaderas del club caballa ya son elementos esenciales para los pequeños que acuden al ‘Murube’.
En la afición del Ceuta hay muchas familias que llevan años siguiendo al equipo y dejándose la garganta para arropar a los suyos. Los Sánchez son una de ellas, siempre se ponen en la zona de preferencia y ya van por una veintena. El culpable de todo es Paco Sánchez que viene arropado por sus dos hijas, Ana y Amelia.
“Nunca faltamos al ‘Murube’ y cada vez somos más. Somos como una peña pero casi sin oficiar. Nos lo pasamos muy bien, primero vamos a desayunar y luego a disfrutar. Es una fiesta, para nosotros una tradición”.
Los tres recuerdan con cariño los ascensos y cómo la afición se ha ido animando. “Yo recuerdo el primer ascenso que fue en Jerez y el siguiente en Elda que fue una autentica paliza y ahora viajes como a Málaga con 4 autocares lleno es increíble. Es una alegría ver cómo está el estadio”.
“Tenemos fotos en las que habíamos 4 o 5 en el campo y ahora no hay ni sitio para poder sentarse. Eso es un orgullo porque esto tiene que convertirse en tradición de abuelos a nietos”.
La familia Sánchez valora sobre todo cuando las cosas iban mal y la afición respondió. “Un momento clave entre la unión y el equipo fue el año pasado. Cuando las cosas iban mal, pero la gente seguía viniendo al estadio y confiando en el equipo. En las buenas está todo el mundo, lo difícil es estar cuando las cosas van mal. Ahí es cuando está la verdadera afición y el Ceuta lo ha demostrado”, explican.
‘Maimon, Maimon, Maimon’... quién no ha escuchado ese cántico en el Alfonso Murube. Es uno de los seguidores más queridos de la grada y que siente devoción por su equipo. “Soy fiel seguidor del equipo caballa. Quiero mucho a este club y sobre todo al presidente y a su junta directiva. Tengo mucho amor a este equipo desde siempre”.
El infarto que sufrió en Algeciras le hizo cambiar y ‘relajarse’ aunque admite que los nervios se llevan por dentro. “Ellos me han permitido estar en el ‘Murube’, pero mucho más tranquilo. Muchas veces me pongo nervioso pero estoy sentado y tengo que tranquilizarme. Este equipo me hace muy feliz y sé que vamos a subir si Dios quiere”.
Maimon nunca deja solo a su equipo, el de sus amores y al que sueña ver en Segunda División. “A pesar de que sufrí el infarto en Algeciras, yo nunca dejo al equipo. Siempre vengo al ‘Murube’ y cada vez que puedo ir fuera también lo hago. Siempre estoy animando al equipo y ellos también me lo dan a mi”.
El Ceuta está creciendo, lo está haciendo por la buena gestión de la junta directiva pero también por la ayuda de muchos ceutíes de manera desinteresada.
Uno de ellos se esconde bajo la figura de Caballati, la mascota del equipo. Juanmi Armuña fue el que pensó la idea y no dudó en hacerla llegar al presidente de la entidad. “Recuerdo que hará unos 30 años que estaba Juan, que salía con un disfraz de súper caballa pero fue durante un par de partidos y luego se perdió. Eso quedó siempre en mi mente, visitando otros estadios en donde tenían sus mascotas. Así se nos ocurrió hacer la nuestra. Pero esto no es solo cachondeo, el objetivo es transmitir los distintos valores del club”.
Para Caballati es un lujo ser uno de los más aclamados cada domingo, ya que muchos niños esperan su turno para poder fotografiarse con él. “El sentimiento que se vive como mascota es precioso. Que las nuevas generaciones que vienen al ‘Murube’ te tengan como referente es muy bonito. Que esos pequeños se acerquen al club y los reciban con los brazos abiertos... Es algo vital para afianzar la marca Ceuta con el trabajo que se está desarrollando por parte de la directiva para profesionalizar el club”.
“Abrir una tienda ha hecho mucho. El regalo de las fiestas por parte de un familiar ya era la camiseta del Ceuta, al igual que le pasó a mis dos hijas. Antes era mucho más fácil ver a los niños con la camiseta del Madrid, del Barcelona pero ahora solo quieren la camiseta del equipo de su ciudad”, explica. El ambiente que se respira ahora en el ‘Murube’ es muy diferente a años atrás. “Ha habido liguillas de ascenso en las que no se ha contado con el respaldo de la afición como se cuenta ahora.
Creo que hay juntar tres hitos: los dos ascensos consecutivos y la permanencia del año pasado. El equipo hizo historia y eso ha hecho que la gente se enganche”.
“Siempre había una sombra negra que decía que el equipo no quería subir. Eso lo hemos escuchado década tras década pero creo que ahora se está viendo que la junta directiva está haciendo una apuesta firme para tener el equipo en lo más alto posible”.
La Asociación de Vecinos del Príncipe Alfonso han remitido un comunicado de prensa este lunes…
El futuro de Muface sigue en el aire en la recta final del acuerdo. Las…
La directiva de la Asociación de Vecinos de Parques de Ceuta se une al movimiento…
La Comandancia General de Ceuta ha anunciado que componentes del Grupo de Regulares número 54…
El Sporting Atlético de Ceuta continúa en un gran estado de forma el grupo 4…
Protagonizó una conducción temeraria que terminó con la Guardia Civil colocándole los grilletes. Ahora el…