El titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta ha iniciado este miércoles un juicio en el cual se acusa a A.C. por un delito de lesiones por imprudencia grave. En el escrito inicial, el Ministerio Fiscal solicita la pena de 18 meses de multa a razón de 20 euros diarios. En la primera vista solo ha testificado la acusada y la víctima, dejando las periciales para una nueva cita, ya que era imposible poder escuchar todas las versiones por incomparecencias de las mismas. Los supuestos hechos ocurrieron el 26 de octubre de 2018, cuando la víctima acudió a una clínica de depilación láser situada
en el Centro Comercial Parque Ceuta que frecuentaba desde hacía dos años. Sin embargo, en la última sesión sufrió unas supuestas quemaduras sobre todo en las piernas, brazos y partes íntimas. Ante esa situación, la afectada ha declarado que la clínica estuvo cambiando continuamente de personal, introduciendo a trabajadoras “sin experiencia”. A pesar de las quemaduras, aseguró que durante la sesión “no notó nada” y le llegó a preguntar si la potencia dada “era muy baja”. Ya con las quemaduras, no acudió al médico de la clínica como ella mismo ha reconocido, pero sí
acudió a Urgencias del HUCE donde tras ser revisada interpuso la denuncia. Por otra parte está la versión de la acusada que ha declarado que es la primera vez que recibía a esta clienta y que miró su historial para ver si había algún detalle importante. Tras hacerle las preguntas previas que se realizan por protocolo decidió empezar la sesión y aseguró que tras dos horas la víctima le repitió en varias ocasiones que “no notaba nada”. “Le bajé la potencia y la cantidad de pistoletazo porque a pesar de que me dijo que no había tomado el sol, la vi muy morena y por eso preferí evitar riesgo, ya que soy muy cuidadosa con mi trabajo”, ha expresado la acusada. Además, A.C. ha insistido en varias ocasiones que ella realizó el tratamiento como a otra persona y que, de haberle creado quemaduras, la clienta lo hubiera notado “desde el primer momento”. Por último ha comentado que la denunciante le pidió que prefería realizarse las sesiones mensualmente, a lo que le contestó que no explicándole los grandes riesgos que conllevaba para su salud.