De gira por España, una de las actividades con las que el Museo del Prado conmemorará su bicentenario y que consistirá en llevar una obra maestra a cada una de las autonomías. El Servicio de Museos de la Consejería de Educación y Cultura prepara la ubicación del retrato de Francisco de Goya El actor Isidoro Máiquez, obra original de gran formato que podrá contemplarse en Ceuta entre el 9 de septiembre y el 6 de octubre de 2019.
Con De gira por España, pinturas de El Greco, Goya, Tiziano, Sorolla, Velázquez o Zurbarán viajarán para enfatizar la vocación nacional que tiene el museo. La primera será La Virgen de la rosa, una obra de Rafael que recalará en el Teatro Museo Dalí de Figueras a partir del 26 de noviembre. La otra actividad que permitirá acercar la obra de los grandes maestros a la calle lleva como título El Prado en las calles y reproducirá pintura española, italiana y flamenca en ciudades como Mérida, Jerez de la Frontera, Eibar o Albacete.
El consejero de Educación y Cultura, Javier Celaya, ha participado en la reunión del Patronato del Museo del Prado en el que se ha presentado el programa de actos con motivo de los doscientos años de la pinacoteca, que contempla exposiciones, actividades y conferencias que arrancarán el próximo mes de noviembre y se extenderán hasta finales del próximo año.
Así es el cuadro
El retrato de Isidoro Máiquez es un óleo sobre lienzo fechado en 1807 de 72x 59 centímetros y se expone en el Museo del Prado desde 1872, no conociéndose cúal fue el primer destino de este cuadro. Otro retrato de Máiquez, también de Goya se expone en actualidad el Art Institute de Chicago. La primera noticia del ejemplar del Prado es de septiembre de 1868, cuando se encontraba en el Ministerio de la Gobernación. La prensa reseñó los daños que había sufrido el cuadro en la revolución de 1868 y por lo que fue enviado al Museo del Prado para su restauración.
El actor Isidoro Máiquez nació en Cartagena el 17 de marzo de 1768 era un personaje relevante de la época. Fue protegido tempranamente por los duques de Osuna, recibiendo de ellos, y de Godoy también, las ayudas necesarias para formarse en París, donde estudió con François Joseph Talma. Introdujo en la escena española las novedades del teatro francés y, sobre todo, la interpretación naturalista de su maestro, cuidando mucho, además, del vestuario y de los decorados. Su éxito en Madrid fue inmediato tras su interpretación, en 1802, de Otelo de Shakespeare, convirtiéndose en el gran actor de la escena española. Su actividad de escritor, de director de teatro, con un concepto noble de su profesión, y de maestro de jóvenes actores, fue decisiva en el desarrollo y modernidad de la interpretación teatral española, promoviendo la creación de una Escuela Nacional de Declamación.