El 5 de junio se produjo el cierre del pabellón de La Libertad tras más de tres meses en los que se convirtió en el hogar y refugio de los que llegaron antes de aquel 13 de marzo a Ceuta y se quedaron atrapados en nuestra ciudad, sin rumbo y sin tener a donde ir. Una instalación deportiva reconvertida en albergue de inmigrantes que tras acogerles de forma excepcional y temporal y tras las quejas de los vecinos de Varela-Valiño volvía a vaciarse. No era el mejor lugar para estos acogidos, pero fue la solución más rápida del Gobierno de la Ciudad tras estar inmersos en un estado de alarma. El Estado, que era quien tenía las competencias, hizo caso omiso, y la Ciudad tuvo que actuar ante tal problema.
Tras desinfectarlo y proceder al cierre total del pabellón deportivo, el objetivo del Gobierno de la Ciudad de Ceuta era volver a acondicionarlo y reparar todos los desperfectos por el paso del tiempo que sufrieron unas personas abandonadas por su país, que tuvieron que vivir ahí pudieron ocasionar. Los internos del pabellón fueron trasladados a la nave del Tarajal y comenzaron las obras dentro del anterior albergue: el de ‘La Libertad’, donde aún continúan. “La pista deportiva está prácticamente lista ya y se está actuando ahora en los vestuarios”, indicaron desde el gabinete de prensa de la Ciudad. Estas fueron las zonas que quedaron en peor estado y en las que se han invertido cerca de 43.000 euros.
Por su parte, las obras que se pretenden acometer en el pabellón Santa Amelia, donde estuvieron los menores también atrapados antes de ser trasladados al centro Piniers, aún no han comenzado, “pero el contrato está a punto de salir”, para recuperar este pabellón que cada fin de semana solía cubrir diferentes partidos de categorías inferiores.
El Instituto Ceutí de Deportes (ICD), adscrito a la Consejería de Juventud y Deporte, abrirá este próximo lunes, día 5, el pabellón de La Libertad y de cara a la nueva temporada deportivo. Una reapertura que se produce tras los trabajos de saneamiento, desinfección y restauración de las instalaciones, utilizadas como albergue temporal durante el estado de alarma decretado por el Gobierno de la Nación a causa de la COVID-19.
De esta forma, a partir de esa fecha ya están organizados los primeros entrenamientos de los equipos de fútbol y balonmano. Además, un técnico del ICD se encargará de velar por el cumplimiento de las medidas de seguridad y protección determinadas por las autoridades sanitarias. De acuerdo a dicho protocolo, los aseos del complejo deportivo sí podrán utilizarse, pero no será posible acceder a los vestuarios. Circunstancia que la Consejería aprovechará para continuar con la mejora de las instalaciones y proseguir con la rehabilitación de los vestuarios.
La Consejería de Juventud y Deporte ha considerado necesario realizar una limpieza profunda de este complejo y efectuar reparaciones en los espacios que habían sufrido desperfectos antes de que el polideportivo reabriera sus puertas. Actualmente, continúan las actuaciones de mejora del polideportivo de Santa Amelia.
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