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El director solicita escolta para la última actividad extraescolar del curso ya que el bus suele quedar atrapado y eso es “intolerable”
Aunque ayer dieron una tregua, las colas de coches-patera que estrangulan la circulación en el entorno del Centro de Educación Infantil y Primaria ‘Príncipe Felipe’ (CEIP) provocan “bastantes daños a nivel general”. Su director, José Manuel Martínez, recordó que ya ha manifestado en varias ocasiones que esta situación “ya llega a afectar a la vida de los alumnos” y, de manera directa, a las actividades extraescolares con especial incidencia en la recogida de los estudiantes.
Por otra parte, “hay una esquina en la zona de Infantil que es prácticamente un baño público”, criticó el director, una insalubridad de la que padres de alumnos no paran de quejarse a la hora de entrada y salida de las clases. Los conductores de los coches-patera pasan muchas horas de espera en sus vehículos y, a pesar de que Martínez entiende que en algún sitio tienen que hacer sus necesidades, se opuso a que sea en los alrededores del centro. “Entonces se pide que vengan los servicios de limpieza y acuden a veces, pero otras tampoco pueden acudir”, lamentó este representante de la comunidad educativa del Príncipe Felipe, que tenía previsto abordar ayer esta cuestión con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, del que destacó su “rápida respuesta”.
Otra de sus preocupaciones estriba en que el tráfico caótico acabe desencadenando el atropello de un alumno. “Por suerte, las dos veces que hemos llamado a la ambulancia esta ha podido acceder de forma rápida porque ha sido antes de que se formen los atascos”, expuso Martínez, quien trasladará la problemática esta semana al delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, después de que contactasen con él los asesores de la plaza de los Reyes.
Martínez es consciente de la complejidad de la situación. Desde enero, padres y madres del Consejo Escolar y la propia Dirección fueron atendidos por Fernández Cucurull. Pese a ser comprensivos con las dificultades que entraña ordenar el entorno fronterizo, el director del ‘Príncipe Felipe’ y el profesorado rechazan cualquier medida que pueda ir en contra de los alumnos “con unas padres bastantes cansados por la situación que afecta a sus hijos”.
Sin embargo, como reconoció el portavoz del colegio, tanto miércoles como jueves de la semana pasada ese desconcierto causado por la afluencia de vehículos dedicados a transportar mercancías “parece que estaba un poco más controlado”con autoridad policial y Guardia Civil en los cruces regulando el tráfico. “Esperando un tiempo prudencial, sí que podíamos acceder y salir al centro. Parece que es una situación que, aunque sea provisional, no nos afecta tan directamente”, indicó Martínez. Solo espera que, en la actividad extraescolar pendiente antes de la finalización del curso, “al menos como hemos pedido en distintas ocasiones a la Guía Educativa Ceuta te Enseña contemos con escolta o ayuda para que los chavales no se queden atrapados en el autocar”. Su intención “no es poner más trabas, sino poner alguna solución” pero, como advirtió Martínez, “afecta a niños y hace excesivo calor” para estar a las “15.00 horas dentro de un autobús”. Algo que Martínez calificó de “intolerable”.
La creación de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA), hace alrededor dos semanas, ha servido de “impulso a la unión” de las familias ante las retenciones en el tráfico. La primera iniciativa del colectivo consistió en un parón parcial de las clases para cuya organización solicitaron al centro que les cediese el salón de actos donde se reunieron e informaron a todos los padres. Fue en ese encuentro, el viernes pasado, cuando se gestó la movilización de ayer.